Finalizadas las vacaciones de Navidad, la plantilla dirigida por Víctor Sánchez ya prepara su próximo encuentro del día 30 ante el Getafe, un equipo con el que el club herculino se ha visto involucrado en múltiples traspasos en los últimos mercados de fichajes. Desde que en el 2006 Riki firmó por el Deportivo para convertirse en una de las referencias ofensivas del club gallego durante varias temporadas, muchos han sido los jugadores que se han movido de un club a otro, en sendas direcciones.
Cuando el de Aranjuez cambió la camiseta azulona por la blanquiazul, Lendoiro tuvo que desembolsarle cuatro millones de euros al club de origen para poder hacerse con los servicios del delantero. Sin embargo, la trásfuga de jugadores entre ambas entidades apenas ha dejado dinero en las arcas de ninguno de los dos equipos desde ese momento.
Cesiones, finales de contrato o rescisiones de mutuo acuerdo han sido protagonistas en las diferentes altas y bajas entre ambas entidades desde el 2010. La situación de inestabilidad del club herculino en los últimos cinco años, marcada por los dos últimos descensos, también fue fundamental para que jugadores como Lopo o Juan Rodríguez decidieran hacer las maletas.
El cambio de equipo de ambos jugadores siguió un guion muy parejo, ya que los dos llegaron libres a Getafe en el verano de 2011, tras el primer descenso del Dépor. El club herculino había intentado renovarlos, pero ellos rechazaron jugar en Segunda y prefirieron marchar a Madrid.
Ninguno dispuso de demasiados minutos en sus primeras temporadas en el equipo de la meseta, por lo que Lopo terminó por retornar a A Coruña en enero de 2014, cuando el conjunto dirigido por Fernando Vázquez tenía enfilado su regreso a la máxima categoría. Para ello, el Getafe le otorgó la carta de libertad y el fichaje salió gratis para el Dépor. Por su parte, JuanRo optó por permanecer en Getafe, donde actualmente es uno de los capitanes de su equipo.
Antes que Alberto Lopo, otro jugador, Javier Arizmendi, ya había realizado un camino parecido de ida y vuelta por ambos conjuntos. El madrileño abandonó el Dépor en el 2007, en su mejor momento como futbolista, cuando el Valencia se hizo con sus servicios a cambio de 1,5 millones. En las siguientes temporadas pasó además por el Zaragoza y el Getafe sin demasiada fortuna. En el equipo madrileño no consiguió hacerse un sitio y fue cedido primero al Neuchâtel Xamax y luego al Mallorca. De modo que en agosto de 2013 decidió desvincularse del Getafe para regresar al Deportivo, donde tampoco contaría demasiado para Fernando Vázquez y acabaría por rescindir contrato.
Otros dos jugadores que también alternaron experiencia en Galicia y Madrid fueron Rubén Pérez y Borja Fernández. En la temporada 2010/2011 el primero jugó en el Deportivo, cedido por el Atlético, mientras que el segundo era jugador del Getafe. Sin embargo, al año siguiente intercambiarían papeles. Rubén Pérez fue cedido por un año al Getafe, y Borja Fernández hizo las maletas hacia A Coruña, donde también jugó cedido una temporada.
En la actual plantilla deportivista, Lopo no es el único con pasado azulón. También Juanfran y Pedro Mosquera jugaron en el Getafe. El madrileño estuvo en la cantera del Getafe desde juveniles y posteriormente dio el salto al primer equipo en la temporada 2007/2008. Por su parte, Mosquera fue jugador del Getafe desde el 2010 hasta el 2014 procedente de la cantera madridista. Además, Víctor Sánchez del Amo también estuvo ligado al club azulón cuando ejerció como segundo de Míchel González.