El periodista de Onda Cero se pasa por Riazor.org para contarnos cómo llega el Getafe al partido de Riazor y cómo ve al Dépor desde la distancia.
Esta semana en nuestra sección ‘Cómo se ven, cómo nos ven’ recibimos la visita en Riazor.org de Chema del Olmo, periodista con una trayectoria espectacular y que actualmente desempeña su labor como periodista de Onda Cero. Sobre este Getafe que visita Riazor y con alguna pincelada del SuperDépor, hablamos con este periodista todoterreno.
¿Cómo es este Getafe?
Pues después de unos años en los que hemos visto a un Getafe apático en su juego y sin carácter, la llegada de Cosmin Contra ha dotado al equipo de algo diferente, aunque todavía es pronto. El Getafe ha perdido calidad en sus jugadores pero ha ganado en carácter. Es un equipo ambicioso, que quiere ir hacia arriba pero la falta de gol es su gran hándicap.
¿Cambia mucho su juego en el Coliseum a fuera de casa?
No. De hecho en la rueda de prensa, Contra ha asegurado que no va a variar su esquema de juego. No lo hizo cuando se enfrentó al Atlético de Madrid y no lo hará ante el Dépor. Repetirá planteamiento y pedirá lo que viene pidiendo desde principio de temporada: máximo esfuerzo y mucha intensidad.
¿Llega el Getafe con bajas importantes?
Lo que más preocupa es la parcela defensiva. Alexis está sancionado por su codazo a Mandzukic y Valera tampoco estará en Riazor por lesión. Arroyo estará en la derecha y el centro de la defensa la conformarán Naldo y Velázquez, jugador cedido por el Atlético de Madrid y que tiene una pinta estupenda.
¿Cómo es Cosmin Contra como entrenador?
Vive los partidos y entrenamientos de forma muy intensa. Constantemente corrigiendo a sus jugadores, a veces incluso en exceso, porque en ocasiones alguno puede pensar que transmite cierto nerviosismo a sus jugadores. Salvando las diferencias es un estilo Cholo Simeone, donde la intensidad es un aspecto clave de su día a día. Pero en este Getafe hay un nombre muy importante: Óscar García. Es el preparador físico y ha logrado imprimir un estado de forma muy alto a estos jugadores.
Háblanos de las bandas del Getafe.
Yoda está demostrando que es un gran jugador. Tiene mucha velocidad y regate y desde luego está sorprendiendo. Hinestroza es un jugador que el otro día por ejemplo estuvo más pendiente de labores defensivas y no brilló, pero es cierto que son jugadores muy importantes y que han desplazado a otras demarcaciones a jugadores como Diego Castro o Lafita.
¿Cómo se ve al Dépor por tierras madrileñas?
Contra ha asegurado en rueda de prensa que si comparece el Dépor que se vio ante el Valencia, el Getafe tiene muy poco que hacer. Los cambios introducidos por Víctor están haciendo efecto. Cavaleiro le ha dado un nuevo aire arriba y piensa Contra que se empieza a notar la mano de Víctor.
¿Qué tipo de encuentro esperas?
El Getafe no va a salir a especular. Irá a jugar al fútbol como hizo en Anoeta donde cuajó una buena primera parte en la que no marcó y luego remontó en la segunda mitad gracias a esa condición física de la que te hablaba.
Partido especial para ti que estuviste varios años cubriendo la información del Dépor.
Tuve la suerte de vivir la etapa del SuperDépor. A nivel personal es la etapa más bonita que he vivido como periodista del mundo del fútbol, incluso por encima de cuando me tocó estar en el día a día de un equipo como el Real Madrid. El porqué es muy sencillo. Era un equipo modesto, que empezó a codearse con Madrid y Barcelona jugando muy bien al fútbol y tuve la suerte de estar ahí. Conocí grandes jugadores y grandes personas como Mauro, Fran, Donato, Bebeto, Claudio, José Ramón, Djukic, Liaño… En fin, era un grupo espectacular.
Cuéntanos alguna anécdota de aquella época.
Para mí es inolvidable el momento trágico, el penalti de Djukic. Lo viví a un metro de Arsenio Iglesias. Nos miramos los dos y reconozco que me di la vuelta y los dos empezamos a llorar. Para mí era como de la familia. La fiesta estaba preparada y fue un palo enorme. También recuerdo alguna cena que otra con Augusto César Lendoiro, así que imagínate, allí estaba yo entre dos aguas, Augusto y Arsenio, una época maravillosa.