El serbio, que regresará a Riazor por segunda vez como técnico vallisoletano, no ha perdido en ninguno de sus enfrentamientos con el Deportivo desde que es entrenador.
El pasado siempre vuelve, o eso dicen. El refrán se cumplirá otra vez el próximo lunes en el estadio de Riazor. Miroslav Djukic regresará a A Coruña por segunda vez como entrenador del equipo visitante. Una leyenda, un mito que volverá a la que fue su casa. En esta ocasión llegará al frente de un Real Valladolid que ha tenido un regreso a Primera División muy distinto al del Deportivo y que ha logrado sumar 21 puntos en 15 jornadas. Además, el juego del equipo está superando todas las expectativas.
Djukic nunca ha perdido contra el Dépor desde que comenzó su aventura en los banquillos. Ha cosechado una victoria y dos empates. Su único triunfo lo logró durante su breve etapa en el Hércules. Fue en la jornada 33 de la temporada 2010-2011, cuando los gallegos se jugaban la vida para evitar el descenso que finalmente se acabaría consumando unas semanas más tarde. Un gol de Tiago Gomes les dio los tres puntos a los alicantinos, que también bajaron de categoría aquella temporada. Era el Hércules de Trezeguet, Drenthe y Haedo Valdez, el único equipo capaz de vencer al invencible Barça de Guardiola aquel año en Liga.
La campaña siguiente (2011/2012) se hizo con las riendas del Valladolid en Segunda División, con el que logró un empate sin goles ante los herculinos en el José Zorrilla en la primera vuelta. También se llevó otro punto en la recta final del campeonato tras firmar un 1-1 en la única ocasión en la que ha visitado Riazor como entrenador. En ese encuentro vieron puerta el mexicano Andrés Guardado y Manucho, que rescató un valioso resultado sobre la bocina.
Caminos distintos en Primera
Ambos conjuntos lograron el ascenso hace medio año. Sin embargo, han seguido trayectorias bastante diferentes. La situación de los de José Luis Oltra es preocupante, ya que acumulan cinco jornadas sin lograr una victoria. Además, deberán sumar los tres puntos si quieren abandonar la última posición de la clasificación.
Los de Djukic viven con mucha más tranquilidad su regreso, pues se encuentran a solo tres puntos de la zona europea. Al contrario que la temporada pasada, en la cual los coruñeses acabaron por delante de un conjunto vallisoletano que tuvo que acudir a la promoción de ascenso para acompañar al Dépor y al Celta a la máxima categoría del fútbol español.