Es una de las grandes paradojas del mundo del fútbol. Se trata de un país muy pequeñito del sur de América, arrinconado por dos gigantes como Brasil y Argentina. Sin embargo, es uno de los mayores productores de futbolistas del mundo. Hablamos de Uruguay, un lugar que además posee muchos lazos con Galicia debido a las constantes migraciones durante todo el siglo XX.
Fue en 1949 la primera vez que un uruguayo se enfundó la camiseta del Deportivo. En realidad fueron dos: José Pedro Lujambio y Dagoberto Moll. Pese a que el primero solo disputó dos partidos como herculino, el segundo causo sensación en A Coruña. A día de hoy sigue siendo el charrúa que más encuentros ha jugado como blanquiazul. En una entrevista en La Opinión de A Coruña, este mítico delantero confesó cómo le convencieron para ir a una ciudad desconocida para él. “Unos coruñeses que vivían en Montevideo me dijeron: ‘te va a gustar mucho la ciudad, además allí las mujeres van a los bares, toman vinos…’ Y yo pensé eso debe de ser Sodoma y Gomorra”. No le fue nada mal y terminó fichando por el Barcelona tras cinco años en el equipo gallego.
En ídolo también se convirtió Martín Lasarte. El defensa de Montevideo se empleó a fondo en sus tres años como herculino y se ganó su propio cántico. Muchos otros uruguayos han pasado por el Deportivo, algunos desapercibidos y otros con más pena que gloria. En 1998 llegaron al conjunto coruñés dos delanteros llamados a ser grandes goleadores. Hablamos de Sebastián ‘El Loco’ Abreu y Sergio Daniel ‘Manteca’ Martínez. Los dos aterrizaron en tierras gallegas con el cartel de ‘killer’, pero la realidad terminó siendo otra muy distinta.
Tuvo que ser Walter Pandiani el que tres años después de los mencionados fracasos anteriores conquistara a la grada de Riazor. Goles, goles y más goles es lo que aportó ‘El Rifle’ al equipo. En total fueron 37 como blanquiazul en partidos oficiales, algunos de ellos clave como los tres en la remontada ante el Paris Saint-Germain o el que inició el 4-0 al Milán en Riazor.
No fue el último charrúa que pasó por el club herculino. Gustavo Munúa, Sebastián Taborda, Jonathan Urretaviscaya y Fabián Estoyanoff fueron los últimos que jugaron en Primera División con el Dépor. Precisamente, este último coincidió con Jonathan Rodríguez en Peñarol, algo que quizás ayudase al ‘Cabecita’ a decidirse por ir a A Coruña. “Decidí venir porque me hablaron muy bien del equipo”, afirmó esta misma mañana tras superar el reconocimiento médico.
Finalmente, el último uruguayo que pasó por Riazor fue un delantero, Diego Ifrán. El de Cerro Chato llegó en el mercado de invierno de la temporada 2013/14 con el equipo en Segunda División y aportó cuatro goles. Más tantos quiere hacer Jonathan Rodríguez, quien a partir de hoy pasa a convertirse en el 20º jugador charrúa que vista la camiseta del Deportivo.