Día: 5 de abril de 2017

Mal encuentro del Dépor, que atenazado por los nervios no fue capaz de ganar a un Granada muy mermado y que salió a Riazor con la intención de dejarle el balón al conjunto local, falto de ideas durante todo el encuentro. El punto de penalti sigue siendo la gran cruz de los coruñeses y esta vez fue Borges el que no acertó desde los once metros.

El Deportivo se mide esta tarde al Granada con la obligación de ganar si no quiere meterse otra vez en problemas.