El Depor aspira a alcanzar la primera plaza del Eibar y eso pasa por una victoria ante el Tenerife. La estadísticas hablan a favor de los de Fernando Vázquez: los isleños no ganan en Riazor desde 1990.
Riazor es un campo maldito para el Tenerife. Hace 24 años que los isleños no saben lo que es ganar en A Coruña. La última vez, en junio de 1990, ambos equipos se jugaban la permanencia en Primera en una eliminatoria directa. Tras el empate de la ida en el Heliodoro Rodríguez López (0-0), el Tenerife se impuso por la minima en la vuelta (1-0), certificando así su continuidad en la máxima categoría del fútbol español.
Han pasado más de dos décadas desde aquel transcendental encuentro y el Tenerife nunca volvió a imponerse en el recinto coruñés. Desde entonces, ambos conjuntos se han enfrentado 11 veces en Riazor (10 encuentros de Primera y 1 de Copa) y el balance es más que positivo para los blanquiazules: cinco empates y seis victorias. El Deportivo, además, se ha llevado los tres puntos en los cuatro últimos enfrentamientos directos (todos ellos disputados en Primera). El antecedente más reciente siendo el de la jornada 25 de la temporada 2009-10. El Depor, entonces dirigido por Miguel Ángel Lotina, se impuso por 3 goles a 1 al Tete de José Luis Oltra gracias a los goles de Juan Rodríguez, Guardado y Colotto. Fue la última vez que coruñeses y tinerfeños se enfrentaron en Riazor.
En el historial global de enfrentamientos, el Deportivo también tiene ventaja. Ambos equipos se han visto las caras en 24 encuentros a lo largo de la historia repartidos entre Primera División (10), Segunda (9) Copa (3), Segunda B (1) y uno de fase de promoción a Primera. El Depor se ha llevado la victoria en 11 de ellos, empatando nueve y perdiendo solo 4. Con el factor campo y las estadísticas a favor, el Depor parece ser la apuesta más segura. Pero los de Fernando Vázquez tampoco se pueden fiar: los tinerfeños se llevaron el último enfrentamiento directo, disputado en el Heliodoro en octubre pasado (0-2), y aspiran a quedarse en puestos de play-off. El Depor sabe lo que le espera.