La competitividad defensiva, la falta de ocasiones, la opción de dos delanteros en el once, Luis Fernández o Borja Bastón, temás de interés de este análisis del encuentro de ayer.
1. ¿Oportunidad perdida? El sábado tropezaron todos los equipos de arriba y el domingo se presentaba una ocasión única para el Deportivo de ponerse a cinco puntos de sus más inmediatos perseguidores. No fue así, pero no es para desesperarse. Un punto más, seguimos sumando y líderes de la categoría. Dos formas de verlo completamente lícitas.
2. El Dépor, sin embargo, solo compitió de una forma en el Nuevo Estadio de La Victoria. Tan solo lo hizo en el aspecto defensivo porque en cuanto al ofensivo lo dejó olvidado en A Coruña. Núñez y Luisinho apenas profundizaron, Culio en las escasas ocasiones que entró en contacto con el balón estuvo demasiado individualista y Borja Bastón no pescó una. Solo la entrada de Luis Fernández dio algo más de equilibrio al ataque.
3. A pesar de no hacer excesivas ocasiones sobre la meta de René -portero local- y de no marcar gol, el Dépor se llevó un botín del feudo jienense. El conjunto dirigido por Vázquez sigue siendo una máquina perfeccionada al cien por cien para defender hasta la más mínima opción de gol en contra. Germán Lux, Carlos Marchena y Pablo Insua, además de la labor de Laure, Manuel Pablo y Álex demuestran el poderío defensivo de los gallegos, que es lo que le ha aupado hasta el liderato.
4. En el ofensivo, como decimos, muchos altibajos. Personalmente, me gustó mucho el experimento de Vázquez en Riazor contra el Alavés con dos delanteros. Los jugadores de la línea del centro del campo del Deportivo, sobre todo los que juegan por el centro, no son excesivamente llegadores. Si juegas con tres por decreto más dos hombres de banda (que tampoco son de perfil ultraofensivo, como Luisinho y Núñez, que son jugadores de más trabajo y desgaste) te limitas a un delantero y las jugadas de estrategia como únicas opciones para marcar gol.
5. Y ya que estamos, para mí en las comparaciones entre Borja Bastón y Luis Fernández, el madrileño sale claramente como perdedor. Es el inagotable trabajo, el entusiasmo, el poderoso juego de espaldas e incluso el mayor olfato goleador por lo que me decanto por el canterano. Y en mucha mayor medida por la punta de velocidad. Borja desperdició varias ocasiones por faltarle la chispa de aceleración. O los dos o Luis. Ésa es mi opinión.
6. Emmanuel Culio. Pudo ser su último partido como blanquiazul y nos pudo dejar un regalo de Reyes en forma de gol que diese tres puntos. Tuvo dos oportunidades de hacerlo, pero en ambas estuvo atento René para despejar su golpe franco. Sin Culio, el Deportivo se queda sin eso, sin un gran ejecutor de prácticamente todos los tiros libres a favor. Pero no es lo único, sin Culio el Dépor se queda sin un líder. Ayer, cuando nadie sabía qué hacer con el balón, ahí aparecía el argentino para provocar una falta.
7. No obstante, lo del liderazgo del de Buenos Aires no es lo que más me preocupa. Creo que en la plantilla hay jugadores que pueden dar un paso al frente tras la marcha del mediapunta. Rudy, Luis Fernández y sobre todo Juan Domínguez deben decir «aquí estoy yo» y demostrarle a Vázquez y a la afición que son jugadores capaces de llevar al Deportivo a Primera División.