El portero riojano renovó su contrato de forma automática el pasado sábado, tras alcanzar la veintena de encuentros oficiales en la presente temporada.
Lo único positivo que puede sacar el aficionado deportivista del partido frente al Granada es la renovación automática del portero Daniel Aranzubia. Una clausula en su contrato garantizaba la renovación del futbolista por una temporada más tras jugar un total de 20 partidos en Liga, cifra que registró al salir de inicio en el choque ante los andaluces. El riojano seguirá siendo blanquiazul por lo menos hasta el 30 de junio del 2014, cuando tendrá ya 34 años.
El guardameta llegó al equipo gallego en el año 2008, procedente del Athletic Club. En el club vasco Aranzubia jugó un total de 189 partidos oficiales y llegó a ser convocado con la Selección Española para la Eurocopa de Portugal, que se celebró en el año 2004.
Su fichaje por el Deportivo sembró dudas entre la afición blanquiazul debido a sus últimos años de irregularidad con los leones –siendo incluso el tercer portero en su última temporada en el club rojiblanco-. Sin embargo, el arquero pronto disipó cualquier incógnita y se convirtió en el dueño de la portería coruñesa.
Después de cuatro temporadas siendo un fijo en el once inicial, el exentrenador deportivista, José Luis Oltra, decidió enviar al banquillo al futbolista de 33 años en el partido frente al Valladolid de la campaña actual y darle la titularidad al argentino Germán Lux. En ese momento, fueron muchos los que pensaron que el ‘1’ no alcanzaría los números necesarios para su renovación, pero, con la destitución del técnico valenciano y la llegada de Domingos Paciência, el que fuera campeón del Mundial Sub20 (Nigeria, 1999) recuperó su puesto en el once inicial. En A Coruña ha disputado un total de 173 encuentros oficiales entre Liga, Copa del Rey y Copa de la UEFA.
Hasta el día de hoy, el de Logroño ha vivido grandes momentos en el conjunto gallego, pero, sin duda, lo sucedido el 20 de febrero de 2011 quedará grabado para siempre en la memoria de los hinchas del Deportivo. Aquel día, anotó, en el último minuto y frente al Almería (1-1), su primer y único tanto como profesional hasta la fecha, y se convirtió en el primer portero de la historia de Primera División en marcar un gol de cabeza.