Comienza la temporada y vuelve Adelante para desnudar a los rivales del Deportivo. Osasuna es el primero. Sueña con repetir una temporada excepcional de la mano de una envidiable planificación económica y deportiva.
El Club Atlético Osasuna acude a Riazor con la intención de prolongar la buena forma que mostraron la temporada pasada, en la que terminaron séptimos y fueron uno de los equipos revelación del campeonato de Liga. La igualdad en la zona media-baja de la tabla obliga a los pamploneses a empezar el curso con una buena racha que los impulse de cara a afrontar el resto del torneo.
Contexto. Época de vacas flacas. Han formado un gran equipo a coste cero.
El conjunto rojillo ha sido uno de los clubes que mejor se ha reforzado en verano en relación calidad/precio. Arribas, Nano, Sisi, Armenteros y Joseba Llorente han fortalecido a los navarros durante la pretemporada, unas incorporaciones que, por otro lado, también se han debido a salidas importantes como las de Nekounam, Ibrahima, Dejan Lekic y, sobre todo, la de Raúl García. El nuevo presidente, Miguel Archanco, ha continuado con la política de saneamiento de Patxi Izco, y ha logrado que Osasuna siga siendo uno de los equipos en mejor situación económica de toda España. El propio míster, José Luis Mendilibar, reconoció que los directivos de su equipo son “unos artistas” por haber conseguido “una mejor plantilla con menor presupuesto”.
El preparador vasco siempre se ha caracterizado por hacer que sus jugadores sean competitivos sin importar el nivel técnico del que dispongan. Los futbolistas del técnico vizcaíno salen a buscar al rival y todos juegan de todo, una característica que ‘Mendi’ ya demostró en el pasado en entidades como el Eibar, el Real Valladolid o el Athletic Club. Los fichajes que se han realizado desde Pamplona, además de ser buenos en su posición, son guerreros, un aspecto muy del agrado de Mendilibar y que seguro hará que los suyos salgan a apretar al Deportivo desde el primer minuto.
Nombres propios. Un potencial ofensivo envidiable. Los rojillos cuentan con uno de los mejores ataques de los equipos que pelearán por la permanencia.
– El ‘crack’: Álvaro Cejudo. Capaz de desenvolverse en cualquier parte del ataque, el extremo cordobés suele participar por banda derecha para tratar de driblar a su par y ganar línea de fondo, o bien recortar hacia dentro para buscar el disparo o una asistencia hacia los delanteros. La temporada pasada, cargó con la difícil papeleta de sustituir a Juanfran Torres, pero poco a poco se convirtió en uno de los líderes del equipo pamplonés. Durante la campaña 2011/2012 repartió siete asistencias y anotó cuatro goles.
– El ‘muro’: Arribas. Pretendido por gran parte de la Primera División, llega a Osasuna con la intención de convertirse en el líder de la zaga. Destaca por su juego aéreo y gran colocación.
– El ‘cerebro’: Puñal. Ante la salida de hombres importantes, el eterno capitán, de un corte mucho más destructor que creador, se augura como el guía de una medular que tendrá que saber sufrir y competir.
– El ‘killer’: Joseba Llorente. El delantero vasco regresa con uno de sus mentores, Mendilibar, para recuperar el olfato goleador. Inteligente, bueno con las dos piernas y un prodigio con la cabeza.
El dato. Un punto mejor que ninguno. Los navarros fueron tras el Real Madrid y el Barcelona el equipo que menos perdió, pero también el que más empató.
La determinación de Osasuna se vio reflejada la campaña pasada en el escaso número de encuentros que perdió. La entidad rojilla tan solo cayó derrotado en diez ocasiones, una cifra que lo colocó como el equipo que menos derrotas acumuló en el curso 2011/2012 tras Real Madrid y Barcelona. Además, los pamploneses fueron el club que más empates logró junto al Racing de Santander, con un total de 15 igualadas.
Un momento histórico. Temporada 2005-2006. Equipo de Champions.
No son muchos los equipos españoles que se han ganado la oportunidad en algún momento de su historia de disputar la máxima competición internacional a nivel de clubes. Uno de ellos es el Osasuna, que adquirió el privilegio tras la excepcional campaña 2005/2006. Los rojillos, guiados por Javier Aguirre, terminaron la temporada cuartos, a solo dos puntos del Real Madrid, segundo. El Barça fue campeón, y el Valencia -tercero-, el otro equipo que superó a los de Pamplona. Desde la jornada 6, el Osasuna estuvo en todo momento entre los cuatro mejores. Ricardo, Cuéllar, Raúl García y Savo Milosevic fueron algunos de los héroes de una campaña histórica.
Una leyenda. Patxi Puñal. La brújula rojilla.
Un capitán a la inglesa. De esos que se juega el tipo cuando alguien se mete con uno de sus compañeros. De esos que no tiene problema en asumir responsabilidades cuando es necesario. De esos que no se imaginan con otra camiseta. Tan solo una cesión de temporada y media en el Leganés evita que Patxi Puñal sea un one-club man. Nadie ha jugado más partidos que él con Osasuna en Primera División. Ningún otro jugador ha sido partícipe de tantos momentos clave en la historia del equipo navarro. Con él en el centro del campo, coordinando movimientos, el Osasuna alcanzó la final de Copa del Rey (2004), se clasificó para la Champions League (2006) y ha sido semifinalista de la Copa de la UEFA (2007). Toda una leyenda que aún sigue siendo la brújula que marca el camino de Osasuna.
Un lazo blanquiazul. Walter Pandiani. Rifle bicolor.
Ha jugado en siete equipos en toda su carrera (dos en Uruguay, cuatro en España y uno en Inglaterra), siendo en dos en los que más ha durado: Deportivo y Osasuna. Con cuatro temporadas en cada una, el ‘Rifle’ ha repartido la mayoría de sus balas entre los colores blanquiazul y rojillo. Al Deportivo llegó muy joven, de Uruguay, y allí vivió los momentos más gloriosos de su carrera. A Osasuna llegó en su madurez futbolística, cuando su carrera amenazaba con entrar en la cuesta abajo, pero mantuvo un rendimiento notable. Las aficiones de ambos equipos recuerdan los suspiros en los instantes previos a los remates de cabeza de Walter Pandiani. Letal. Como muy pocos.