‘Adelante’ analiza al equipo dirigido por Luis García, llamado a ser uno de los clubes importantes de esta temporada como sucedió en la 2007/2008, cuando rozó la gloria europea. Con Ángel Lafita como su gran estrella, los azulones vuelven a tierras gallegas con cuatro exdeportivistas bajo el brazo.
El Getafe acude a Riazor con la intención de despegar tras el impulso que le dio el pasado fin de semana su victoria ante el Real Madrid. Tras los fichajes de verano, los madrileños afrontan una de sus temporadas más ilusionantes de los últimos años.
Contexto. Refuerzos necesarios para regresar a Europa. Ángel Torres ha vuelto a dominar el mercado de forma soberbia.
El Getafe inició los últimos dos cursos con las altas expectativas de alcanzar una plaza que le permitiese disputar alguna de las competiciones continentales, aunque siempre partiendo del primordial objetivo de permanecer en Primera División. El conjunto madrileño sufrió en sendas temporadas las consecuencias de tener una plantilla corta, lo que que le impidió dar el salto definitivo hacia los puestos europeos, y le obligó a centrarse en no caer en las tres posiciones de peligro. Este verano, Ángel Torres ha querido olvidarse del sufrimiento y le ha dado a Luis García todo lo que ha pedido. Lafita, Abraham Paz, Xavi Torres, Paco Alcácer y, el último en llegar, Álvaro Vázquez se han incorporado a una plantilla que anteriormente ya contaba con grandes futbolistas como Alexis, Valera, Míchel, Lacen, Pedro León, Barrada o Diego Castro, y que tiene en ‘El Cata’ Díaz y en Miku las únicas bajas sensibles, ya que el resto de salidas se han correspondido con jugadores que no contaban para el cuerpo técnico.
En su segunda campaña al frente del club y con una plantilla más amplia, el entrenador azulón tratará de darle continuidad al buen juego que mostró su equipo en algunos momentos del pasado curso. El triunfo que consiguieron en la última jornada ante el Real Madrid hacen que la entidad getafense encare el duelo ante el Deportivo con la moral por las nubes y con la ilusión de realizar, por fin, una temporada al nivel esperado que les permita entrar en la élite del fútbol español. La velocidad y el balón parado, las mejores armas de Luis García para dañar a los coruñeses.
Nombres propios. Alto nivel en todas las líneas. Un equipo equilibrado que destaca por su línea de tres cuartos.
– El crack: Ángel Lafita. Fichaje estrella de los azulones para la temporada 2011/2012. Tras ser uno de los protagonistas de la salvación del Zaragoza, el jugador de 28 años busca alcanzar Europa con la casaca azulona. Bueno con las dos piernas, el aragonés mantiene la velocidad y el regate que lo hizo triunfar en tierras gallegas. Como segundo delantero, Luis García le pide más llegada para mejorar sus números anotadores. Tiene potencial para superar regularmente los diez tantos en Liga. Letal junto a Pedro León, Barrada, Gavilán o Diego Castro.
– El ‘muro’: Moyá. Después de haber sido un fijo para Luis García durante la campaña 2011/2012, en la que estuvo a sus órdenes como cedido, el Getafe decidió abonar tres millones de euros al Valencia para traspasar al portero de manera definitiva. Rápido, alto y con grandes reflejos.
– El ‘cerebro’: Xavi Torres. Incombustible en la medular, ha sido otra de las grandes incorporaciones de los madrileños. Fuerte, disciplinado tácticamente y con capacidad para dar el primer pase en la salida de balón.
– El ‘killer’: Álvaro Vázquez. Aunque su fichaje se cerró en el día de ayer, hoy estará en Riazor y podría debutar con su nuevo club. Hábil con el balón en los pies y con un gran desmarque, a sus 21 años Álvaro todavía debe mejorar en el remate.
El dato. Más español que nunca. El Getafe es, tras el Athletic, el equipo con menos jugadores extranjeros en sus filas.
Las salidas de Ustari, ‘El Cata’ Díaz, Masilela y Miku han hecho que la entidad madrileña se convierta en el segundo club con mayor representación española de toda la Liga BBVA, solo superado por el Athletic Club. Mehdi Lacen (Argelia) y Abdel Barrada (Marruecos) son los únicos futbolistas azulones que militan en el conjunto getafense y que no han nacido en territorio español, al contrario que los otros 23 jugadores de la plantilla.
Un momento histórico. 10 de abril de 2008. Cruel desenlace del sueño.
Era el partido más importante de la historia del Getafe y es el más recordado, por mucho que haya disputado dos finales de la Copa del Rey. El club azulón se medía al Bayern de Munich por entrar en semifinales de la Copa de la UEFA, y lo recibía en su estadio. Tras el 1-1 de la ida, tan solo servía ganar o un empate sin goles. Contra adelantó al Getafe en la primera mitad y, cuando todo parecía hecho, en el descuento, igualó Ribery, llevando el partido a la prórroga. En ella, el Getafe salió como un huracán y no tardó ni 5 minutos en colocarse 3-1 gracias a los tantos de Casquero y Braulio. Así, llegó el partido al minuto 114. Sin embargo, dos tantos ‘in extremis’ de Luca Toni igualaron la contienda, y el Bayern avanzó ronda. Y otra vez que Goliath se comía a David. No pudo ser más cruel el destino con el conjunto madrileño.
Una leyenda. David Belenguer. El eterno capitán.
David Belenguer llegó al Getafe, procedente del Betis, con 31 años. Fue una de las incorporaciones del club azulón para su debut en la máxima categoría del fútbol nacional. Desde su llegada, se convirtió en el auténtico jefe de la defensa azulona, y tardó muy poco tiempo en convertirse en capitán. Allí jugó durante seis temporadas, participando en todos los momentos históricos de la entidad que preside Ángel Torres, hasta que volvió al Betis. Es una auténtica leyenda para la afición, que habla de él como el mejor jugador de la historia del Getafe.
Un lazo blanquiazul. Cambios de cromos. De Riazor al Coliseum.
Ángel Torres ha contratado en las últimas temporadas a varios futbolistas procedentes del Deportivo. Alberto Lopo y Juan Rodríguez terminaron contrato con el Deportivo tras el descenso a Segunda División y ambos firmaron por el Getafe. También llegó ese año Rubén Pérez, en un acuerdo en el que también intervino el Atlético de Madrid, y que terminó con la cesión de Borja al Dépor, quién ha vuelto este verano al club azulón. Lafita también hizo el viaje desde A Coruña hasta Getafe, donde aterrizó este año, pero tras hacer escala en Zaragoza. Arizmendi fue otro jugador que pasó del Deportivo al Getafe, aunque lo hizo tras pasar por Valencia y Zaragoza. Sin embargo, el primer jugador que unió de forma directa ambas ciudades lo hizo en sentido inverso: Riki.