Adelante, en su Cara B, se centra en Las Palmas, que visita Riazor sin mucho en juego, pero con el reto de conquistar el campo más complicado de la categoría. Valerón, Manuel Pablo y Aythami, ante el equipo en el que comenzaron sus trayectorias futbolísticas.
La UD Las Palmas acude a Riazor con la intención de sellar automáticamente su permanencia en Segunda División. Los jóvenes futbolistas canarios buscarán dar la sorpresa en el estadio más complicado de la categoría para, además, mostrarse a todo el fútbol español.
Contexto. Una segunda vuelta irregular protagonizada por los rumores. Varios futbolistas han sido vinculados con otros clubes.
El conjunto amarillo se enfrentó al Deportivo en la primera vuelta con muchas opciones de entrar en el playoff de ascenso y siendo una de las grandes revelaciones del inicio de temporada. A pesar de su gran primer tramo de campaña, las posibilidades de alcanzar objetivos mayores se han ido diluyendo con el paso de las jornadas. Y es que el equipo dirigido por Juan Manuel Rodríguez, capaz de vencer en estadios tan complicados como Balaídos, ha hecho una segunda vuelta en la que no ha cumplido las expectativas, con altibajos tan pecualiares como el sucedido en los últimos dos partidos en los que vencieron por 1-4 al Villarreal B y cayeron en casa ante el Cartagena de forma consecutiva. Además, algunos de sus futbolistas importantes como Jonathan Viera o Vitolo han sido vinculados con otras entidades -el primero lo tiene hecho con el Valencia para el próximo curso-, una situación que sin duda ha influido en el rendimiento deportivo de un club que necesita asentar una plantilla si no quiere limitarse a ser exclusivamente una cantera para los grandes de España.
La pizarra. Escuela del jogo bonito. El fútbol asociativo por encima de todo.
La escuela canaria siempre se ha caracterizado por sacar a la luz a grades talentos cuya característica principal ha sido la de poseer un manejo privilegiado del balón. Juan Manuel Rodríguez ha entendido a la perfección la filosofía de la UD desde su llegada a la entidad hace ya bastantes años. El descubridor de Juan Carlos Valerón, entre otros, ha dotado a Las Palmas de un fútbol alegre y vistoso; combinativo y a la vez contragolpeador gracias a la velocidad y a la calidad de futbolistas como Jonathan Viera o Vitolo. Entrenados desde pequeños en una misma dirección, el equipo senior de los canarios es el fiel reflejo de un modelo de club ejemplar. Su mentalidad es la de intentar construir cada jugada desde atrás, sin rifar ningún balón, apoyándose en la clase de su centro del campo y en el enorme talento de sus mediapuntas. En ocasiones, su adelantada defensa peca de inexperiencia, -sobre todo cuando se juntan David García, Ruyman y Laguardia- y ya ha habido varios encuentros en los que se han puesto por delante en el marcador y sus errores atrás los han hecho quedarse a las puertas del triunfo. Las bajas de Ruyman, Laguardia y Momo no impedirán a Rodríguez formar un once de garantías.
Nombres propios. Clase y calidad en un equipo muy joven. La magia de Jonathan Viera marca la diferencia.
– El ‘muro’: Pignol. A sus 35 años es, junto a Javi Guerrero, el jugador más veterano del equipo. Líder de una jovencísima defensa, esta temporada ha sido indiscutible para Juan Manuel Rodríguez gracias a su veteranía y a su sensacional disposición táctica. Su sueño es “subir con la UD a Primera” antes de retirarse.
– El ‘cerebro’: Jonathan Viera. Un mago del balón. El canario tiene una diestra prodigiosa y en cualquier momento es capaz de sorprender con una filigrana, con un pase imposible o con un disparo lejano. Será uno de los mejores de nuestro fútbol.
– El ‘killer’: Vitolo. A pesar de que no ha jugado en las últimas jornadas por sanciones y molestias físicas, Vitolo es tras Viera el futbolista con más calidad y futuro del equipo amarillo. Capaz de jugar tanto de extremo como de delantero gracias a su velocidad y desborde, tiene el fútbol y el gol en sus venas. Podría no jugar de inicio en Riazor.
– El ‘fiasco’: Juan Guerra. Llegó a Las Palmas en verano para ser el ansiado pivote defensivo pero nunca estuvo a gusto. Solo jugó un partido en cuatro meses y en invierno decidió regresar a Venezuela.
Horizonte. Vacaciones anticipadas. Casi tan lejos del descenso como del ascenso.
La Unión Deportiva Las Palmas jugará en Riazor con la tranquilidad de haber cumplido el objetivo mínimo de la salvación -su ventaja con el Alcoyano, que marca el límite, tras el descenso del filial del Villarreal empujado por el primer equipo, es de 15 puntos- y con el amargo sabor de boca que supone no poder luchar por un objetivo más ambicioso -se encuentra a 12 puntos del Córdoba, que marca la zona que separa los puestos de ‘play-off’ del resto de la tabla clasificatoria-. Sin embargo, la ambición por ganar en el estadio del líder, donde tan solo el Hércules se ha llevado los tres puntos, supone una fuerte motivación para el mejor equipo canario de la actualidad. Treinta puntos separan actualmente a ambos equipos.
Aficionado ilustre. Juan Carlos Valerón. Magia canaria.
Fue en Arguineguín, en un pequeño pueblito de la provincia de Gran Canaria, donde Juan Carlos Valerón dio sus primeras patadas a un esférico. Sus compañeros de clase, los ‘chachos’ -que no ‘muyayos’- fueron los primeros en gozar de esos pases al milímetro de los que han disfrutado algunos de los mejores delanteros del mundo en las últimas dos décadas. Y fue en el equipo amarillo donde empezó a hacerse un hueco en el fútbol español, hasta convertirse en uno de los mediapuntas más talentosos de las últimas dos décadas. Allí donde va, recuerda que él nació en aquella tierra y le desea todo lo mejor al equipo de su infancia. Cuando vuelve a casa por vacaciones, siempre pasa por el Estadio Gran Canaria y las instalaciones de la Unión Deportiva Las Palmas, para saludar a los que compartieron los comienzos.
Un lazo blanquiazul. Línea directa. De Las Palmas a A Coruña.
Desde que en 1996, el Dépor puso sus ojos en el jugador más espectacular de Segunda División española, el ‘Turu’ Flores, para ofrecerle jugar en Primera, varios han sido los jugadores que han hecho el vuelo ‘futbolístico’ Las Palmas – A Coruña sin ninguna escala intermedia. Junto al ‘Turu’ llegó Manuel Pablo, en una operación combinada que se saldó en 1 100 millones de las antiguas rubias. Unos años más tarde, llegaron hasta Riazor dos de las perlas de la cantera canaria, el hábil Momo y el goleador Rubén, si bien sus incorporaciones no fueron éxitos tan incontestables como las de sus predecesores. La deuda de Las Palmas con el Deportivo por Schürrer, que hizo el trasvase inverso, estuvo relacionado con aquella operación. Un poco más tarde, el Dépor volvió a pescar en Segunda, para hacerse con el ‘comandante’ de la zaga canaria, Aythami Artiles.
Adelante. Cara A. https://www.riazor.org/asi-es-la-ud-las-palmas/