No me gusta que el lunes haya competición oficial. No me gustan los actuales dirigentes que manejan a su antojo el fútbol español. No me gusta que todos los personajes que chupan del deporte rey de este país se rían de los aficionados. Pero, a pesar de todo ello, Riazor no falló y demostró una vez más que es un campo que debe estar ligado a la Primera División.
Autor: Alfonso Núñez
La llegada de Javi Camuñas deja casi cerrada la plantilla con la que José Luis Oltra buscará la salvación esta temporada. Augusto César Lendoiro confirmó en esa presentación, que esperará al tramo final del mercado veraniego para buscar la guinda al grupo de jugadores del conjunto deportivista.
Con dos goles en esta pretemporada, Pablo Insua ha centrado el interés de los deportivistas. El canterano, que todavía no ha cumplido 19 años, está respondiendo a las expectativas, y la afición se pregunta si está preparado para ser titular en el primer equipo.
La plantilla deportivista sigue incompleta. Las llegadas y renovaciones de jugadores del centro del campo son la antesala de los refuerzos que están por venir. Reforzar las dos áreas se ha convertido en el objetivo blanquiazul.
En tiempos de ‘vacas flacas’, los jóvenes valores del filial pueden ser un activo muy importante para un Deportivo que económicamente anda muy justo. Juan Carlos debe ser la explosión definitiva de un fútbol base que, además, puede servir para mantener intacta la ilusión de la afición.
A un mes del comienzo de la competición, las dudas crecen en torno a la plantilla del Dépor, de cara a una temporada difícil y exigente para José Luis Oltra. La llegada de André Santos se antoja un escaso bagaje, a 30 días de que Osasuna se plante en Riazor.
El diario Marca destaca el interés del Dépor en hacerse con los servicios de Agus, central izquierdo, que esta temporada ha militado en la AD Alcorcón. El jugador apura sus vacaciones en Vigo tras una temporada muy larga en el conjunto madrileño.
Este es un buen momento para detenerse en una figura clave para el deportivismo en los últimos años. Manuel Pablo iniciará su decimoquinta temporada en Riazor.
Alfonso Núñez analiza en su columna ‘Desde la tele’ la salida del Deportivo este verano de hombres como Colotto y Andrés Guardado, que dejan -como también fue el caso de Adrián López o Lopo- cero euros en las arcas tras su marcha.
He esperado varias semanas para reflexionar y analizar el trabajo de José Luis Oltra a lo largo de la temporada. No lo tenía fácil. Llegó a un equipo en depresión tras un descenso traumático con una exigencia clara: ascender y, a ser posible, como campeón.
Llega la época veraniega y con ella el momento en el que los representantes tratan de buscar el mejor acomodo posible para sus jugadores.
Por fin terminó la Liga. Me encanta el fútbol y soy feliz cuando el Dépor gana, pero estaba deseando que esto se acabara y el ascenso fuera una realidad.
Caprichoso es el fútbol en infinidad de ocasiones. Y este año se ha vuelto a demostrar. Una temporada complicada, llena de lesiones, y un papel secundario que pocos esperaban. Xisco se erigió en el héroe improvisado de dos noches de primavera.
Esta frase la he escuchado en numerosas ocasiones, pero, debido a mi edad, no había tenido conciencia de lo que realmente significaba. La Segunda es muy compleja y realmente se hace larga para cualquier club. El Dépor es un equipazo, y está firmando una temporada de ensueño, pero a falta de tres jornadas para el final el ascenso aun no es matemático y no puede fallar más en este tramo final.
El mes de mayo suele ser sinónimo de un mes clave en la consecución de éxitos o fracasos deportivos en lo que al fútbol se refiere. En el mes de mayo, Djukic falló un penalti que nos privó de nuestra primera Liga. La temporada pasada por estas fechas el equipo perdía la categoría tras una cruel última jornada. Pero el quinto mes del año también evoca grandes recuerdos para el deportivismo. Donato y Makaay sellaban un histórico triunfo sobre el Espanyol que significaba la primera liga deportivista.
Uno de los sueños más recurrentes en cualquier joven es la de convertirse algún día en jugador profesional. Sólo unos pocos privilegiados son capaces de labrarse una carrera futbolística con la que poder vivir del deporte rey.
El pesimismo tras perder ante el Almería debe desaparecer en favor de la confianza que la afición herculina siempre ha demostrado con el Deportivo y, sobre todo, con David Rochela.
Dos partidos seguidos logrando victorias agónicas. Dos partidos en los que sufrimiento y disfrute fueron unidos. Dos partidos en los que la afición sintió un enorme orgullo por los suyos. No importó el fallo de Aranzubia, ni la debilidad defensiva, una semana más la ilusión se palpa en todos y cada uno de los aficionados deportivistas.