Richard Barral no quiso irse del Deportivo sin despedirse y compareció ante los medios para explicar la decisión: «Es un acuerdo entre el presidente y yo. Nada más. Lo veníamos hablando desde hace tiempo y no ha habido un solo momento de discusión. Quiero agradecerle al club estos tres años y medio maravillosos. Ha sido una época de mucho desgaste, pero me voy dejando amigos. No conocía al presidente, sólo conocía a Fernando Vidal, pero creo que ahora con Tino me une una relación de amistad».
Barral explicó que no ha sido una etapa fácil: «Cuando llegas a un club que viene de un proceso malo, con pocos jugadores en propiedad… había que levantar el club y colocar los cimientos. Este año esperábamos una temporada tranquila, en el mes de agosto todo eran felicitaciones, pero la realidad ya no es esa. Estamos en la posición que estamos, no se están cumpliendo las expectativas y asumo la responsabilidad. Podría poner mil disculpas, pero las plantillas se hacen a priori. Creo que es la mejor de los últimos siete u ocho años, pero el rendimiento no es el adecuado«.
El ya ex director deportivo deportivista descartó que su salida tenga que ver con la de Vidal, de hace unos meses: «No ha influido para nada. Sé que habrá especulaciones. Que si he quedado debilitado por su marcha, que si me llevo mal con Tino… mi relación es fantástica con el consejo«.
También reconoció que ya hay trabajo hecho y que la dirección deportiva ni mucho menos queda desierta: «Cuando no hay rendimiento tienes que traer refuerzos, ya estábamos en camino de las posiciones a reforzar. Ahora empieza otro momento donde hay que trabajar duro y si en este momento hay desgaste hay que apartarse a un lado y dejar vía libre. El director deportivo es la cabeza visible, pero hay mucha gente trabajando. Las cosas están en marcha y no desde hoy, para poder fichar ahora se debe hacer un trabajo desde hace meses. No sé si el club va a incorporar a otra persona».
Después de varias temporadas logrando la permanencia sobre la bocina, Barral reconoce que esta campaña es la primera en la que se siente decepcionado. «En la primera plantilla en la que estuve yo, el presupuesto era de 10 millones brutos con muchos jugadores cedidos. A partir de ahí ves el crecimiento. Los 20 millones por Lucas, lo que hemos rechazado por otros jugadores… El primer año los resultados fueron normales, el segundo hicimos una primera vuelta de UEFA y la segunda salió mal, creo que la gran decepción es este año. El sentimiento es de tristeza, porque se junta ser director deportivo del Dépor con haber nacido aquí, no es como estar en otro club. Me voy fastidiado también porque este año iba a ser el del despegue, de dar un paso más».
Para terminar, Barral reconoció que no se deja afectar por la presión externa, aunque sabe que es muy criticado, y se refirió a ese perfil de jugador más defensivo para el centro del campo que parece echar en falta el equipo. «El fútbol que gana desde hace 15 años es el de la selección española. Los alemanes han cambiado el modelo, vas a ver a los ingleses y por fin se están dando cuenta también. Ese jugador del que todos habláis a mí también me gusta, pero me gusta el bueno, el que cuesta dinero y no podemos pagar. Podríamos ir a Segunda B y traer a uno, pero a los diez minutos se le estaría criticando. Defender es concentración y actitud. Sé que hubo momentos del otro fútbol, pero para mí el fútbol es Messi, Benzema, Kroos, Modric, Xavi… el fútbol que gana. Se trata de subir la calidad ofensiva y defensiva. No me niego a traer jugadores defensivos, pero sí a los que no suban el nivel. Claro que a mí me gusta ese medio defensivo, pero yo quiero a Busquets o Casemiro».