Mientras que el Recreativo de Huelva repite liderato por primera vez, ni uno solo de los 11 partidos de Segunda División finalizó en empate.
Cuando la Liga de Fútbol Profesional decidió pasar de dotar a los triunfos con tres puntos en lugar de dos, se buscaba incitar a los equipos a perseguir la victoria con mayor ímpetu. Ya se sabe que la teoría no se corresponde con la práctica en muchas ocasiones, pero esta vez en Segunda División sí funcionó, puesto que ninguno de los 11 partidos disputados terminó en empate.
Ya sea con un ajustado 1-0 como vieron los espectadores del Mirandés–Ponferradina y del Tenerife–Castilla, con goles de Pablo Infante y Ayoze respectivamente, o con un 0-1 como el que le dio Víctor Casadesús al Mallorca ante el Barcelona B, lo cierto es que los marcadores no hacen más que confirmar lo impredecible que resulta semana tras semana la categoría de plata. Y si no que se lo pregunten a la UD Las Palmas, que cayó estrepitosamente goleada de su visita a Lugo debido a los tantos de Pita, Rennella y Víctor Díaz, o incluso al Sabadell, que pasó por encima del Real Jaén gracias al penalti transformado por Aníbal y a un doblete del eterno Raúl Tamudo.
Además, el Recreativo de Huelva rompió el gafe que tenían hasta ahora los líderes y se afianzó en lo alto de la tabla después de sacar los tres puntos en Zaragoza; Henríquez igualó para los maños, pero Ruyman y Linares dictaron la sentencia onubense. Tras el combinado de Sergi Barjuan está un Córdoba que se deshizo del Girona con un Xisco en plan estelar anotando por partida doble. Precisamente, ese mismo 2-0 es el que se presenció en el electrónico del Alcorcón–Alavés, con Sergio Prendes e Iribas como artífices de la victoria amarilla.
Por otro lado, Borja Bastón anotó contra el Hércules su segundo doblete del curso para regalar al Deportivo de La Coruña un nuevo triunfo a domicilio. Menos suerte corrió el Numancia que, aunque recortó distancias por medio de Juanma a poco del final, cayó por 2-1 en casa del Murcia por culpa de los tantos de Dos Santos y Saúl Berjón. Para terminar por todo lo alto, Scepovic se confirma como el jugador revelación de Segunda después del triplete que convirtió para que el Sporting de Gijón derrotase por 3-2 a un Eibar al que de poco le sirvieron los goles de Capa y Urko Vera.