Al técnico sevillano se le resisten los equipos que estuvieron a su cargo anteriormente. Desde su etapa en el Deportivo de La Coruña (2005-2007) hasta la actual en el Mallorca, solo ha ganado en cuatro ocasiones contra sus exequipos en Liga.
Equipo al que deja de entrenar, equipo al que le cuesta ganar. Esta estadística va ligada a Joaquín Caparrós desde que se puso al mando del cuadro blanquiazul en las temporadas 2005/2006 y 2006/2007. Los partidos que en esas dos temporadas enfrentaron a Deportivo y Sevilla –conjunto del que había sido técnico entre 2000 y 2005- se saldaron con un empate (0-0 en Riazor en la temporada 2005/2006), una victoria (0-2 en el Sánchez Pizjuán en la misma campaña) y dos derrotas en el segundo año del entrenador sevillano en el Dépor (1-2 en Riazor y 4-0 en el partido de vuelta).
Bilbao sería su siguiente destino después de A Coruña para los cuatro siguientes años, entre 2007 y 2011. En ocho ocasiones se enfrentó al conjunto blanquiazul, sumando seis derrotas (dos en casa y cuatro fuera), un empate (en San Mamés en 2007) y una victoria (2-0 en su tercera campaña en tierras vascas). Durante esta misma época se midió también contra otro exequipo: el Sevilla. De esos encuentros, cinco fueron derrotas -cuatro de ellas por goleada del club hispalense-, dos victorias y un empate.
Desde el 2011, año en que llegó a Mallorca, acumula una derrota y un empate con el Athletic y dos derrotas y un empate contra el Sevilla. Esta semana toca encontrarse en Riazor ante los pupilos de José Luis Oltra, con los que no coincide en el terreno de juego desde hace dos temporadas.
En definitiva, de los últimos 25 enfrentamientos que Caparrós ha tenido en Liga contra sus exequipos desde el año 2005 –Sevilla, Deportivo y Athletic de Bilbao- el preparador sevillano tiene un saldo de resultados poco halagador: cuatro victorias, cinco empates y 16 derrotas. Este domingo se verá si Caparrós consigue dejar atrás el fantasma de sus exequipos o si el Deportivo continúa alimentando esta curiosa estadística.