Arranca la semana de entrenamientos para el Deportivo. Los herculinos han realizado esta mañana la primera de las seis sesiones previstas para preparar el encuentro del domingo ante el Real Oviedo en el Carlos Tartiere (18.00h). Tras las malas sensaciones del partido ante el Almería, la victoria en tierras asturianas se antoja fundamental para recuperar la confianza y una de las armas a las que quizá pueda agarrarse Natxo González es Carlos Fernández. Aunque sin el alta, el sevillano volvió a trabajar con normalidad y está en la recta final de su recuperación.
Los servicios médicos irán con mucha precaución y la intención es arriesgar lo mínimo posible con la reaparición del delantero. Su historial en los últimos meses, con varias recaídas, preocupa de cara a la recta final, pero el mal momento del equipo puede precipitar su regreso. Carlos podría suponer una mejora en el césped y también un impulso en lo anímico para un grupo que necesita buenas noticias.
Llegan más buenas noticias en el apartado físico y la enfermería blanquiazul continúa vaciándose. En la práctica de hoy, Fran Molano, readaptador de la primera plantilla, solamente tuvo bajo sus órdenes a Edu Expósito, además del ya habitual Michael Krohn Dehli. El catalán, con su sanción de dos partidos aún vigente para el partido en Oviedo, trabajó al margen con ejercicios preventivos.
También Matías Nahuel y Quique González regresaron al grupo tras una semana al margen. El extremo jugó 24 minutos ante el Almería en Riazor y el delantero 13, por lo que parece que ambos están ya totalmente recuperados de sus respectivas molestias. Mismo caso para Fede Cartabia. El argentino terminó el partido contra el Almería con una contusión que lo obligó a ejercitarse en el gimnasio el día después. Sin embargo, esta mañana volvió a ser uno más y se entrenó con normalidad.