No está el Deportivo para demasiados sentimentalismos, pero con la visita del Racing de Santander vuelve a Riazor un viejo conocido como Cristóbal Parralo. El exentrenador deportivista regresa por segunda vez en menos de un año a la que fue su banda durante unos meses, y lo hace con otro equipo diferente. En marzo de 2019 llegó con el Alcorcón y ahora lo hace dirigiendo un conjunto cántabro que es rival directísimo del Dépor en la lucha por la permanencia.
Y es que el duelo de este jueves en Riazor se presenta dramático para ambos bandos. Con 19 puntos, el Racing está sólo un escalón por encima de los blanquiazules (18) en la clasificación. El que salga derrotado del encuentro quedará muy tocado, tendiendo en cuenta que además en la segunda vuelta empieza a decidirse el golaverage particular. El resultado en El Sardinero fue de empate (1-1), por lo que una victoria, aunque sea por la mínima, tendría más valor que únicamente los tres puntos.
Por el momento, a Cristóbal no le ha ido demasiado bien desde que tomó las riendas del conjunto santanderino. Tras a un buen inicio, con un empate en Lugo y una contundente victoria ante el Extremadura en casa, la maquinaria se atascó y desde entonces, 23 de noviembre, no ha vuelto a ganar otro encuentro. Además, como le acaba de suceder al Dépor, también quedó fuera de la Copa ante un conjunto de inferior categoría, el Murcia, aunque en su caso ya en la primera ronda. En el último partido de Liga logró sumar un punto en el campo del Mirandés.
Balance favorable
Desde que fuera despedido del Dépor, Cristóbal se ha enfrentado en dos ocasiones al conjunto coruñés y de momento puede presumir de un balance positivo. Con el Alcorcón se impuso en Santo Domingo (1-0) y logró arrancar un empate en su anterior visita a Riazor (2-2), una imbatibilidad ante su exequipo que intentará extender más allá de este jueves.