Segunda victoria consecutiva del Deportivo lejos de Riazor (0-1), en un encuentro cerrado que se decidió por un error que aprovechó Quique González. El equipo coruñés completó una actuación muy seria ante el Granada y aunque le faltó claridad en ataque, apenas sufrió cuando tuvo que defender la ventaja en el marcador. El conjunto coruñés mantiene el ritmo de los de arriba, vence a un rival directo y le gana el golaverage.
- Mucho respeto, poco ritmo. La responsabilidad por la clasificación comienza a pesar y ambos equipos salieron al césped con mucho respeto por su rival. La premisa principal era no cometer errores, lo que llevó a una circulación muy lenta y poco paso por el centro del campo. El Dépor apostó por una presión alta, aunque contemplativa, con un 4-1-4-1 que se establecía en la zona de tres cuartos e impedía una salida cómoda de los locales.
- Atascados. A pesar de ser dos de los conjuntos más goleadores de Segunda, ninguno de los dos atraviesa su mejor racha de cara a la portería rival. Eso quedó patente en la primera parte. Porque hubo ocasiones. Como un disparo de Cartabia desviado, al igual que el de Montoro. O un remate al larguero de Germán a balón parado, como otro de Quique que acabó en gol, anulado por… seguramente el árbitro sea el único que sepa por qué no concedió ese tanto. Los de Natxo sufrieron sobre todo en balones largos a la espalda de la defensa, mientras que los problemas arriba fueron casi siempre de claridad. Valle, Quique y Fede se pensaban demasiado cada acción y decidieron mal en prácticamente todas ellas.
- Premio a la insistencia. Tras el descanso el equipo coruñés mantuvo el plan de presionar a los defensores locales, incluso un paso más adelante. En la primera Cartabia achicó y rechazó un despeje que le cayó a Quique González. El pucelano disparó con el alma y batió a Silva por entre las piernas.
- El Dépor desagradable. Durante muchos minutos después del gol, el equipo se pareció mucho al de la última media hora en el Molinón, ese equipo desagradable que pide Natxo. Serio y disciplinado en defensa, inteligente con el balón para defender lo más lejos del área posible. Todo se revolucionó en los últimos diez minutos, con un gol anulado al Granada por mano y la consiguiente locura. La defensa mantuvo el asedio y Dani Giménez volvió a salvar al equipo con una gran parada en la única ocasión nazarí.
FICHA TÉCNICA
Granada CF: Silva; Víctor Díaz, Germán, Martínez, Quini; San Emeterio, Montoro; Vadillo (Puertas, min.64), Pozo, Fede Vico (Ojeda, min.79); Ramos (Rodri, min.55).
RC Deportivo: Dani Giménez; David Simón, Domingos, Marí, Caballo; Bergantiños, Mosquera (Didier Moreno, min.79); Cartabia (Nahuel, min.66), Expósito, Valle (Somma, min.86); Quique González.
Goles: 0-1, min.49: Quique.
Árbitro: Pizarro Gómez, madrileño. Expulsó a Nahuel con roja directa y amonestó a David Simón, Moreno, Caballo y Domingos en el Dépor y a Montoro, Puertas, Rodri, Ramos y Quini en el Granada.
Incidencias: Estadio de Los Cármenes. Partido correspondiente a la jornada 25 de Segunda División.