Fernando Vázquez y José Luis Martí se reencontrarán este viernes por la noche en Riazor. Dos viejos conocidos de hace más de 20 años, cuando coincidieron en el Mallorca como entrenador y jugador respectivamente. En aquella ocasión, el de Castrofeito recomendó al balear, de 24 años, que se buscase equipo ante la gran competencia que había en la plantilla mallorquinista. Pese a eso, Vázquez confesó este jueves que había visto algo en él que le auguraba un buen futuro. Y parece que no estaba equivocado.
“Yo sabía que iba a ser entrenador”, confesó el actual técnico deportivista en la rueda de prensa previa al partido ante el Girona. Para el míster gallego, hay jugadores en los que es “fácil de ver” un posible futuro en los banquillos. “Algún día podemos tener una charla sobre qué jugadores del Deportivo pueden ser entrenadores, eso es fácil de ver. Por aquel entonces, en el Mallorca, Martí estaba entre ellos”, confirmó.
Poco protagonismo en el Mallorca
Con Fernando Vázquez en el banquillo mallorquinista, Martí apenas jugó dos partidos en la temporada 1999/00. Eso sí, uno de ellos, el de su debut en Primera División. El entrenador gallego, destacó este jueves que le pareció un futbolista brillante pese a darle pocos minutos. “Me parecía brillante como jugador. Tenso, superconcentrado, disciplinado. Un futbolista que a todos los entrenadores les encanta”, aseguró. Aún así, el entrenador del Dépor reconoció también que nunca pensó que fuese a llegar tan lejos en su carrera como futbolista. Para Vázquez, el Martí jugador puede servir como ejemplo para muchos jóvenes. “Nunca pensé que fuese a tener el éxito que tuvo. Superó mis expectativas con mucho y eso es una gran lección para todos. No era un jugador con grandes cualidades técnicas, pero sí tácticas. Eso, con una gran motivación interior como tenía, lo llevó a tener la carrera que tuvo”, afirmó el de Castrofeito.
Martí acabaría haciendo caso a Vázquez, pero una temporada más tarde. Cuando el gallego ya no estaba en el banquillo mallorquinista, se iría al Tenerife. Fernando explicó los motivos que le llevaron a apenas contar con Martí. “Yo tenía un superequipo. Tenía un once titular fijo y le recomendé que se fuese cedido”, reconoció el gallego. Ese consejo seguido posteriormente por el balear relanzó su carrera como jugador. Pasó de ser un futbolista de 24 años sin apenas oportunidades a jugar tres años en el Tenerife (logrando un ascenso), cinco campañas en el Sevilla (con dos Uefas y una Copa del Rey ganadas) y una temporada en la Real Sociedad. Esa salida que le recomendó Vázquez se alargó a nueve temporadas. Al final de casi una década fuera de casa, se ganó a pulso jugar en el Mallorca. En el equipo de su tierra estaría siete cursos, logrando un quinto puesto en Liga y sufriendo un descenso. Ya en 2015, con el equipo en Segunda y casi 40 años, puso fin a su carrera.
Llegada meteórica a los banquillos
Un año después, Vázquez volvería a Mallorca y allí ya no estaría Martí. El balear se retiró un 31 de mayo de 2015, y en noviembre ya estaba en el banquillo del Tenerife. Su cambio del césped por los banquillos fue tan meteórico como en su día había previsto Fernando Vázquez. Gallego y mallorquín cruzarían sus caminos en un par de encuentros, con mejor balance para el de Castrofeito, que logró ganar un partido y empatar el otro. Curiosamente, unos años después, ambos capitanearían desde el banquillo los mejores momentos del Deportivo seguramente en las últimas temporadas. El playoff de ascenso a Primera, aunque con triste final, con Martí en el banquillo; y la racha de siete victorias consecutivas con Vázquez como técnico. Este viernes por la noche vuelven a verse las caras al mando de dos colosos de la Segunda División Española.