Llevamos únicamente dos jornadas de Liga y el Deportivo ha cosechado una victoria y un empate. Sin embargo, el juego desplegado por los hombres de Garitano no convence a la afición, por lo que muchos piden un cambio en el esquema elegido por el técnico vasco de cara al duelo frente al Athletic. Así, el debate sobre si hay que apostar por una ‘revolución’ en este aspecto o si, por el contrario, debe primar la continuidad, está sobre la mesa. Dos de nuestros redactores se enfrentan en este contrapunto, ¿con cuál estás de acuerdo?
¿Debe Garitano cambiar de sistema?
NO | MIGUEL SANZ
Tras dos partidos y cuatro puntos en el casillero del Deportivo, un cambio en el esquema empleado por Garitano sería una medida excesivamente precipitada. Si bien es cierto que las sensaciones ofrecidas por el equipo frente a Eibar y Betis fueron muy mejorables, algo que reconoció el propio míster, la mejor vía para lograr un salto de calidad en este aspecto es la de la continuidad en la idea que se pretende ejecutar sobre el césped.
Más que en el dibujo elegido, puede que los cambios deban surgir en torno a los hombres que salten al terreno de juego, donde un Joselu al que no han tardado en lloverle elogios podría aportar mucho al equipo. Las posibles bajas de Bruno Gama y Fernando Navarro obligarían al técnico deportivista a dar la titularidad a hombres como Luisinho, que quizá ofrezcan alternativas al juego cuadriculado de las dos primeras jornadas. Con todo ello, no hay que olvidar que de momento los resultados están acompañando al Dépor, por lo que parece demasiado pronto para realizar un cambio en algo tan relevante como el sistema de juego.
SÍ | CARLOS SANTAMARINA
Como bien dices Miguel, llevar a cabo un cambio de sistema cuando sólo han transcurrido dos jornadas y encima los resultados han sido muy positivos puede sonar demasiado drástico, precipitado o incluso inoportuno, si pensamos que con él lo que se busca es cambiar la dinámica del equipo. El error está precisamente ahí, en ver estas modificaciones como un último recurso al que los entrenadores sólo suelen acudir cuando los resultados los sitúan en el filo de la navaja, y no como una alternativa más entre las múltiples soluciones de las que suelen disponer los técnicos de los equipos de élite.
Para empezar no se trataría de ningún experimento o hecho novedoso, ya que desde principio de pretemporada Gaizka Garitano viene trabajando el esquema formado por tres centrales, algo que ha puesto en escena en varios amistosos e incluso en el tramo final de los dos partidos de Liga disputados hasta el momento, en ambos casos con éxito. En segundo lugar está el nivel y las características de los centrales blanquiazules, jugadores con un gran poderío en el juego aéreo y que serían un seguro en defensa ante un equipo como el Athletic, que destaca precisamente en esa faceta, y al mismo tiempo una gran baza en ataque. Y por último la baja de un fijo como Navarro. No sería mucho aventurarse afirmar que su sustituto será Luisinho, un jugador de un perfil mucho más ofensivo que el del catalán y similar al de Juanfran en el costado derecho. Ambos futbolistas sufren en tareas defensivas pero destacan por su capacidad y peligrosidad a la hora de sumarse al ataque, y un esquema con tres defensas centrales se ajusta como anillo al dedo a sus cualidades, ya que dispondrían de mucha más libertad para explotar al máximo esas virtudes.
EL TERMÓMETRO DE LA AFICIÓN
[poll id=»116″]