El Deportivo y el Castilla son dos de los conjuntos que menos tantos a favor llevan, si bien las razones que hay detrás de esos números son diferentes.
Este domingo en Riazor se vivirá un choque que enfrentará a dos escuadras que atraviesan en este arranque de campeonato dificultades para ver portería. El Deportivo de Fernando Vázquez es el equipo menos goleador de los nueve primeros clasificados, y el Castilla, actual colista, es el club menos anotador de la categoría.
Los blanquiazules suman nueve tantos tras 11 jornadas, o lo que es lo mismo, anotan una media de 0,81 goles por partido. Para lograr estos registros, los coruñeses necesitaron realizar 116 disparos, por lo que el porcentaje de acierto de sus futbolistas a la hora de buscar portería es de casi un 8%. Una de las claves que el entrenador deportivista viene analizando en las últimas semanas y que explica el pobre bagaje goleador, es la falta de ideas en ataque para generar ocasiones, tanto en número como en claridad de las mismas para poder ver puerta.
Por su parte, el filial madridista solo ha podido anotar seis goles en este inicio liguero, lo que le deja con una media de 0,5 tantos por encuentro. A diferencia de los herculinos, los blancos chutaron al arco en más ocasiones -155 tiros-, pero su porcentaje de acierto es inferior –no llega al 4%-. Estos datos demuestran que los de Toril tienen uno de sus grandes problemas en la falta de eficacia a la hora de aprovechar sus ocasiones, y no tanto en la capacidad para generarlas.
Otro aspecto importante, y que sin duda es determinante a la hora de marcar la posición de cada equipo en la tabla, es el aprovechamiento que hacen de los goles que consiguen marcar. De media, cada gol de los de Riazor vale 1,89 puntos, mientras que cada tanto madrileño permite sumar 0,67 puntos. Lógicamente, estos números son consecuencia de un factor diferencial entre estos dos clubes: el Deportivo suma más puntos gracias a ser el segundo conjunto menos goleado de la Liga Adelante, pese a sus problemas ofensivos; mientras que los blancos tienen en ambas áreas importantes dificultades.