Juan Carlos Valerón se despidió de la afición deportivista, que no del fútbol, con una emotiva rueda de prensa acompañado de varios integrantes de la plantilla una vez consumado el descenso del Deportivo.
El fútbol es, en muchas ocasiones, muy injusto. Le debía una despedida con honores a Juan Carlos Valerón en su Deportivo tras haberle quitado tanto en forma de lesiones interminables, dejando a su equipo en Primera División, pero el capricho del destino ha querido que el canario haya dicho adiós al equipo que tanto le dio el día de su tercer descenso, el segundo con el Dépor. Lo hizo como él sabe, con humildad, y agradeciendo todo el cariño que ha recibido todos estos años.
«No es la mejor noche pero esta temporada dejo de pertenecer al Deportivo de La Coruña, creo que ha llegado el momento de terminar mi ciclo en Coruña y lo hago con mucho dolor por la situación que hemos vivido, es una decisión tomada desde hace varias semanas. Tenía la ilusión de decirlo de otra forma, con la permanencia, pero es un momento muy duro especialmente para mí por muchos motivos, es difícil poder expresar de alguna manera el sentimiento que me llevo», comenzó explicando el canario. Agradeció «a todo el deportivismo, el club, el presi, a todos mis compañeros especialmente a mi amigo, compañero, capitán, hermano (por Manuel Pablo); y gracias a todo el mundo por estar aquí. Le deseo al Dépor todo lo mejor del mundo y quién sabe si en el futuro nos encontraremos en el camino, nunca sabes qué pasará, no cierro las puertas».
Sobre su futuro, indicó que «en las próximas semanas decidiré, no es una retirada, simplemente creo que mi tiempo en el Deportivo se acaba, son muchos años, los últimos de un desgaste personal muy importante para mí, he llegado al límite de mis fuerzas por la responsabilidad tan grande que siempre he tenido aquí. Ahora necesito pararme y ver qué pasará en el futuro». Hay rumores que hablan de que irá a Qatar, y otros que volverá a su tierra. «Qatar es una de las opciones, volver a Las Palmas otra, pero no tengo ofertas ni nada, dejo una puerta abierta por lo que pueda pasar aunque según lo que valore a lo mejor dentro de dos semanas anuncio que me retiro», explicó.
También tuvo palabras para la afición. «Es difícil expresar con palabras todo ese cariño que me llevo, de agradecimiento a todo el mundo, especialmente esta temporada cuando uno decide que es el momento, era muy importante para mí dejar al equipo en Primera. Siento tristeza, dolor, pena, Dios ha querido que fuese de esta manera, no puedo hacer otra cosa. Estaré eternamente agradecido al Deportivo por todo lo que me ha dado a mí y a mi familia», apuntó.
El presidente Augusto César Lendoiro aclaró que era algo que «sabía desde hace unos días, intenté y sigo intentando que no deje de ser más que una pesadilla». Sobre su persona, argumentó que «no es solo un jugador más, ha sido uno de los mejores jugadores del fútbol español, por su forma de ser, por su bondad, el unánime cariño de la afición. Es el primer referente en todo el deportivismo en estos 25 años que vamos a cumplir». Reconoció que el club preparará un homenaje para el canario. «Valerón habrá jugado su penúltimo partido en Riazor, no es lo mismo cómo se ha comportado él y cómo lo han hecho otros…».
Además, su gran amigo Manuel Pablo se refirió a él como «la mitad de mi vida, es duro, pero se lo merece todo. Valerón es el Deportivo y el Deportivo es Valerón, un tío que al campo que va toda afición le reconoce su fútbol. Siempre ha estado muy implicado con el club, nunca lo esperas pero solo sé que le irá bien y seguiremos unidos para toda la vida, no nos hace falta ni hablar para comprendernos. Le echaré de menos el año que viene y sé que querrá que consigamos el ascenso el año que viene».