El Dépor parece no haber aprendido la lección. En la semana en la que se superaron los abonados con el que se terminó la temporada pasada, en la que hubo 7.000 personas para la presentación de los nuevos fichajes, el equipo sigue dándole motivos a la afición para dudar semana tras semana. El inicio del partido ante la Real fue un esperpento. Jugadores sin alma, desenchufados. Como en el primer gol, en el que un veterano como Luisinho le dio el balón a Odriozola para que sacase rápido una falta lateral. Balón para Xabi Prieto y caramelo al punto de penalti que Juanmi no desaprovechó. A la siguiente jugada llegó el segundo. Mal despeje de Bruno Gama a la frontal y pelota franca para Illarramendi, que batió a un Tyton que todavía estaba desperezándose.
Los blanquiazules parecieron derrumbarse tras esas dos bofetadas tempraneras. No ayudó el plan de Pepe Mel, que cegado por la presencia por fin de delanteros parece haberse olvidado de que el fútbol empieza en el centro del campo. Mosquera y Guilherme no carburan juntos y el técnico debe ser a estas alturas el único en toda A Coruña que no lo ha visto. Demasiado perdidos con el balón, lo peor es que cuando se pierde la pelota están muy desordenados para defender, permitiendo fáciles transiciones por el centro a cualquier rival que se atreva a conducir.
Con el paso de los minutos el Dépor se fue arriba, pero sin más ideas que los desplazamientos en largo de Schär y las arrancadas de Sidnei, centrales y organizadores al mismo tiempo. Precisamente de un pase del suizo llegó el tanto de Adrián. Un remate espectacular del asturiano, lleno de clase, cruzando el balón de primeras y sin dejarla caer. Porque sí, el equipo de momento tiene el mismo fútbol que el año pasado. Más bien poco. Pero arriba ha ganado mucho en talento. El gol despertó al equipo, que empujado por la grada estuvo a punto de empatar antes del descanso, pero Andone remató a las manos de Rulli.
Mel no aguantó más a Lucas en el banquillo y a poco de empezar la segunda parte lo sacó al campo. Su presencia fue suficiente para aumentar el espíritu del equipo, que le devolvió a la Real el golpe de los primeros minutos. Juanfran sacó un centro al segundo palo que Adrián bajó para que Andone fusilara a Rulli. El desastre estaba arreglado, pero el conjunto blanquiazul quiso meterse en líos de nuevo. A punto estuvo. Januzaj pudo hacer el tercero, pero la eficacia fue menor que en el arranque.
Ambos técnicos decidieron mover el banquillo y sacaron toda la artillería al campo. El Dépor terminó con Lucas y Adrián en punta. Debutó también Valverde, que se le vio con una marcha más en el tiempo que estuvo en el campo. Pero el esfuerzo para equilibrar la balanza le pasó factura a los blanquiazules, que apenas tuvieron gasolina para volver a inquietar a Rulli.
La falta de energías. Y el miedo. El equipo acabó metido en el área a pesar de que la Real estaba con virtualmente con uno menos por la lesión de Aritz con todas las sustituciones hechas. Ese miedo lo castigaron los donostiarras a balón parado, en otro grave error defensivo. El propio Aritz, cojo, peinó un balón en el primer palo y Llorente apareció en el área pequeña para hacer el tercero. Illarramendi apuntilló al Dépor con el cuarto tanto. Se coló hasta la cocina sin problemas y batió a Tyton con un fuerte disparo raso.
El equipo sigue sin ganar en esta Liga y, lo que es peor, continúa dando la sensación de no tener un plan más allá de lo que puedan lograr sus individualidades. Ataca mal y defiende peor, con un balance de nueve goles encajados en tres encuentros.
FICHA TÉCNICA:
RC Deportivo: Tyton; Juanfran, Schär, Sidnei, Luisinho; Cartabia (Valverde, min.64), Guilherme, Mosquera, Bruno Gama (Lucas, min.49); Adrián, Andone (Bakkali, min.71).
Real Sociedad: Rulli; Odriozola, Íñigo Martínez (Llorente, min.66), Aritz, Kevin; Illarramendi, Zurutuza, Xabi Prieto; Juanmi (Canales, min.55), Januzaj (Vela, min.74), William Jose.
Goles: 0-1: Juanmi, min.3. 0-2: Illarramendi, min.4. 1-2: Adrián, min.27. 2-2: Andone, min.50. 2-3: Llorente, min.82). 2-4: Illarramendi, min.86.
Árbitro: Munuera Montero. Amonestó con tarjeta amarilla a Guilherme en el Dépor y a Juanmi, Rodrigues y Odriozola en la Real Sociedad.
Incidencias: Estadio de Riazor, 21.942 espectadores. Partido correspondiente a la 3ª jornada de Liga.