Los refuerzos han incrementado la verticalidad del juego de Fernando Vázquez. Ante el Sabadell, ya se pudo vislumbrar un fútbol más eléctrico.
«Ganamos calidad combinativa, técnica y velocidad» señaló Fernando Vázquez en la rueda de prensa tras finalizar el partido. A falta de su total acoplamiento -y de recuperación de forma física en algunos casos- parece que los nuevos fichajes de ataque aportan una nueva dimensión en el apartado ofensivo de los herculinos.
Diogo Salomao es sin duda el que ha llegado más en forma. El luso, haciendo gala de su velocidad y desborde, generó varias situaciones de peligro y fue una pesadilla para la defensa del C.E. Sabadell. Notable actuación en líneas generales que culminó con gol incluido. También deleitó a los espectadores con una brillante jugada de autopase, donde Pérez impidió que el extremo marcase uno de los tantos de la jornada.
Bryan Rabello, por su parte, aportó calidad en el juego entre líneas. El chileno supo asociarse y ofreció ayuda a Juan Dominguez cuando hizo falta. También buscó desmarques situándose en línea con la defensa contraria para descargar trabajo a Borja Bastón. El mediapunta además, provocó la expulsión de Carlos Herández.
El costamarfileño Ibrahím Sissoko llega fuera de forma, pero dejó una pequeña muestra de sus cualidades en una contra en la que buscó a Toché. «No fue gol, pero tenía que haber sido», apuntó Fernando Vázquez en rueda de prensa.
El delantero murciano demostró en pocos minutos que no ha perdido el olfato, pues no perdonó tras una jugada donde ganó muy bien la espalda a la defensa catalana y en la que terminó haciendo el segundo tanto de los blanquiazules.
Si bien el Deportivo ha hecho un partido intermitente en líneas generales, se ha dejado entrever el potencial que atesora el plantel tras las nuevas incorporaciones. Tal y como dijo el técnico: «Estamos en la tercera transformación del equipo».