Edu Expósito está centrado en su objetivo de lograr el ascenso con el Dépor para regresar cuanto antes a la máxima categoría. Sin embargo, la gran temporada del centrocampista no ha pasado inadvertida para más de un club de Primera División. Si el conjunto blanquiazul no consiguiera su objetivo a final de temporada, el catalán sería una opción más que apetecible para muchos equipos. El que más interés ha mostrado hasta el momento es el Eibar, y Edu encaja en el perfil de futbolista deseado por el conjunto que dirige José Luis Mendilibar.
El Eibar se ha especializado en las últimas temporadas en sacar un gran rendimiento a jugadores fichados en Segunda División. La gran temporada que está realizando provocará la salida de más de un futbolista en el próximo mercado de fichajes. Uno de los que tiene más papeletas es Joan Jordán. El catalán termina contrato en 2020 y varios equipos de la parte alta de la liga quieren hacerse con sus servicios este mismo verano. El Eibar ingresará por tanto una importante cantidad de dinero y reforzará el centro del campo. El conjunto armero ya se reforzó la temporada pasada con una operación similar, cuando fichó a Sergio Alvárez del Sporting de Gijón tras no lograr el ascenso a Primera División.
A día de hoy, el Dépor no contempla la salida de ningún futbolista y menos tras la crisis institucional que vive el club. La entidad herculina tiene por delante un intenso mes de mayo en el que se conocerá el nombre del nuevo presidente y su planificación deportiva. Edu Expósito tiene contrato en vigor hasta 2022 y para salir sería necesario un acuerdo entre clubes. Ahora mismo, Edu prefiere centrarse en el equipo que le dio la oportunidad de saltar a la élite y un ascenso del Dépor a Primera aseguraría su continuidad en el club blanquiazul.
Edu ha sido un fijo en las alineaciones de Natxo González y José Luis Martí. Con el técnico vasco empezó como titular y luego tuvo que ganarse un puesto en el once dentro de la política de rotaciones que llevó en el primer tramo de temporada. Sin embargo, el catalán se adueñó de uno de los vértices del rombo dentro del sistema de Natxo. Logró adaptarse a la perfección y un importante número de encuentros fue el futbolista más destacado del cuadro blanquiazul. Con Martí jugó pegado a una banda en su estreno en el Sadar pero en los dos últimos encuentros ya ha jugado en su posición natural: una de las dos posiciones del doble pivote.
A falta de seis jornadas para la finalización de la temporada regular, el Dépor sigue centrado en lograr una de las plazas que da acceso a jugar el playoff de ascenso a Primera División.