Apasionante partido el disputado en Riazor entre el Barcelona y el Deportivo (4-5). Empezaron los gallegos sin intensidad y les cayeron tres goles en 20’; fueron a buscarlos y los encontraron. Ahí destacó Álex.
De gala Riazor para recibir al Barcelona, con un espectacular mosaico en el momento en el que saltaban los jugadores al césped. Día precioso en A Coruña y lo que podría haber sido un sueño que se cumple cada mucho tiempo acabó siendo eso, un sueño. Los de José Luis Oltra volvieron a regalar los primeros minutos a su rival. Sin intensidad, sin actitud, sin alma. Que el Dépor deje jugar a su contrincante en Riazor denota la falta de confianza de los herculinos, pero dejar jugar al Barça suele ser sinónimo de goleada. Así fue y en ocho minutos el resultado ya era de 0-2. Diez minutos después, Messi hizo el tercero.
Fue entonces cuando el Dépor decidió salir a buscar al Barcelona a su campo con mucho mayor éxito. Álex Bergantiños escenificó la garra de los gallegos. Intenso, ejemplar, el coruñés fue el mejor de los gallegos. Primero fue Riki que envió el balón al palo en una acción invalidada por fuera de juego, más adelante lo intentó Zé Castro a la salida de un córner y finalmente lo consiguió Riki en una gran carrera que terminó con el penalti de Mascherano sobre el de Aranjuez. Pizzi puso el 1-3. Era el minuto 27 de encuentro y una chispa de esperanza invadió Riazor. Más lo hubiese hecho si el árbitro Paradas Romero hubiese decidido mostrar al argentino la segunda amarilla por la acción.
Siguió presionando el Dépor y siguió consiguiendo réditos. Bruno Gama, Bergantiños y Valerón combinaban e intentaban conectar con Riki, que buscó una y otra vez la jugada individual. Tanto estaba funcionando esta disposición y esta actitud valiente que la suerte al fin se puso de su parte. Córner botado por Pizzi que tras una serie de rebotes le llega a Bergantiños que recorta distancias. 2-3 y más de la mitad del partido por disputarse. Del 0-3 al 2-3 por ser valientes, por ponerle garra y –por qué no- por echarle lo que hay que echarle sobre un campo de fútbol a un rival de altura. Pero no aguantó la intensidad el Dépor y antes del descanso volvió a dejar jugar cómodo al Barcelona. Resultado: un gol de Leo Messi y varias oportunidades culés rechazadas por la defensa local. 2-4 al descanso.
La segunda parte no pudo comenzar mejor. Falta sobre Riki al borde del área que Pizzi la ejecuta de forma magistral a la escuadra izquierda de Valdés. Poco después la fiesta seguiría: nueva falta sobre Riki que supone la segunda amarilla y expulsión de Mascherano. El Barcelona a falta de 40 minutos se quedaba con uno menos. Y Riazor se lo creía. Pero se lo creía con miedo, ya que Messi estrelló un balón en el larguero que por lo menos hacía temer al Deportivo el hecho de poder recibir algún gol más que imposibilitase la remontada.
El Dépor continuó creciendo a medida que comía metros al Barcelona. Las oportunidades no se hicieron esperar para el bando local. Pizzi y Riki, ambos desde la derecha y con la pierna izquierda, probaron a Valdés sin éxito. También tuvo sus opciones el Barcelona, sobre todo de la mano de Messi y de Pedro, que sustituyó a un David Villa que por fin se fue de Riazor sin marcar.
A pesar de estar con uno menos, el Barcelona siguió siendo amo y señor del balón en la segunda mitad. El Dépor, agotado por la presión, fue incapaz de disputarle la posesión al equipo que mejor la sabe aguantar de todo el mundo. Y así fueron pasando los minutos hasta que Leo Messi demostró una vez más porque dicen de él que es el mejor del mundo.
El astro argentino recibió de espaldas, aguantó la embestida de Marchena, prosiguió encarando a la defensa blanquiazul y puso el balón muy lejos de Aranzubia. 3-5 y parecía que el sueño se acababa. No obstante, y cuando pocos se lo esperaban, Jordi Alba rechazó el balón hacia su portería y se coló por encima de Valdés. 4-5 y cerca de 15’ para el final.
No le faltaron opciones al Deportivo para empatar. Zé Castro, Nelson Oliveira… pero ninguno fue capaz. El partido se acabó entre la desidia y la pérdida de tiempo de los blaugranas y Aranzubia buscando suerte en los saques de esquina. El Dépor remó para morir ahogado en la orilla pero se pudo observar nueva demostración de que el ‘espíritu Bergantiños’ dará más de una alegria a la parroquia herculina.
Ficha técnica:
RC Deportivo: Aranzubia; Laure, Marchena, Zé Castro, Ayoze; Álex Bergantiños, Abel Aguilar; Bruno Gama (Camuñas, min. 62), Valerón (Nelson Oliveira, min. 62), Pizzi; Riki.
FC Barcelona: Victor Valdés; Montoya, Song, Mascherano, Jordi Alba; Sergio Busquets, Cesc (Xavi, min. 62), Iniesta; Tello (Pedro, min. 56), Messi y Villa (Bartra, min. 53).
Goles: 0-1. Jordi Alba, min. 03. 0-2. Tello, min. 08. 0-3. Messi, min. 18. 1-3. Pizzi, pen, min. 27. 2-3. Bergantiños, min. 37. 2-4. Messi, min. 43. 3-4. Pizzi, min. 48. 3-5. Messi, min. 77. 4-5. Jordi Alba, pp, min. 78.
Árbitro: José Luis Paradas Romero (comité andaluz). Mostró tarjeta amarilla a Iniesta y a Messi por parte del Barcelona. Bergantiños, Valerón, Laure y Ayoze la vieron por el bando local. Mascherano se marchó expulsado por doble amonestación.
Incidencias: Encuentro de la octava jornada de la Liga BBVA disputado en el estadio municipal de Riazor. Lleno. Espectacular mosaico antes del comienzo del encuentro.