Víctor Fernández tiene la firme intención de utilizar a Juan Domínguez como el mediocentro más posicional. Que sea quién saque el balón jugado desde atrás; el que inicie las jugadas, los ataques.
Juan Domínguez tendrá un papel preponderante esta temporada en la plantilla del Deportivo. El gallego, que lleva varias campañas a un nivel notabilísimo, será el encargado de llevar la voz cantante en el centro del campo blanquiazul.
«Juan Domínguez se tiene que especializar en una función más concreta para el equipo. Él sabe cuál es, sabe qué le voy a pedir y lo va a hacer perfecto. Es un chico con una jerarquía tremenda. Estoy buscando cosas para la Liga«
Estas palabras de Víctor Fernández en rueda de prensa dejan entrever levemente las intenciones que tiene el técnico maño de colocar a Juan Domínguez como el mediocentro más posicional. Que sea el encargado de sacar el balón jugado y de lanzar los ataques cuando el equipo recupere en campo propio. Que se inserte entre los centrales cuando el equipo tiene el balón para empezar a tejer la jugada. El de Zaragoza quiere un equipo veloz (de piernas y de cabeza) y nadie mejor que él para ser el verdadero protagonista del juego. El que mueva los hilos del títere.
El faro será el 10, que jugará de 5.
Otra de las cosas que denotan este movimiento (y de forma más notable) es la posición en la que se ubicó el de Pontedeume cuando saltó al terreno de juego en el minuto 72 de la final del Teresa Herrera. Se marchó Juan Carlos, así que sobre el campo todavía estaban José Rodríguez y Cezary Wilk. Juan Domínguez se situó detrás de ellos. En una posición entre los centrales y los mediocentros. Sacando el balón, en un espacio amplio y libre de marca. Mientras, los interiores -ambos de brega y de trabajo constante- tenían más llegada al área rival. Un movimiento que recuerda al que en su momento hizo Ancelotti con Andrea Pirlo, salvando las distancias y el contexto.
JUNTO A JOSÉ RODRÍGUEZ
Durante los 26 minutos iniciales de la semifinal contra Nacional, se atisbó la que será la pareja de mediocentros titular al comienzo de la Liga. Juan Domínguez y José Rodríguez apuntan a ser importantes para el fútbol que quiere ejecutar Víctor Fernández, tal y como se desprendía de sus palabras en rueda de prensa. «Me interesa probar más lo de Juan y lo de José Rodríguez, que son dos futbolistas con una capacidad física extraordinaria. Encima mezclan bien, juegan bien, te llegan a las dos áreas…». Cezary Wilk o Álex Bergantiños reforzarían esa parcela una vez Fariña se acostumbre al costado izquierdo como pudimos ver durante otros 18 minutos de la final frente al Sporting de Gijón. Seguramente lo utilice contra los equipos más fuertes del campeonato.
Un poquito de historia…
En este brillante artículo de Axel Torres sobre Carlo Ancelotti en MarcadorInt, el periodista catalán explica el movimiento que hizo el italiano con Andrea Pirlo en el AC Milan. Extraigo este fragmento:
«Su Milan era una brutalidad y su Milan se construye a partir de la decisión más trascendente del fútbol italiano moderno: reconvertir al media punta Andrea Pirlo en medio centro. Este movimiento táctico es extraordinario: quizá uno de los mejores de los últimos veinte años. Sin embargo, como cuenta este magnífico artículo en inglés del Daily Mail, el mérito debe ser compartido. Carleto Mazzone, el hombre que dirigió a Pep Guardiola en el Brescia, fue el primer entrenador que situó a Pirlo como medio centro cuando Andrea estuvo cedido en el modesto conjunto lombardo en 2001. En aquel equipo, Roberto Baggio era el indiscutible media punta, y Mazzone, para dar cabida a Pirlo, le dio sus primeros partidos oficiales en una posición retrasada. Carlo Ancelotti, cuando lo tuvo en el Milan, calcó esa misma estrategia ya que la media punta estaba ocupada por un Rui Costa en aquel momento muy consolidado. De este modo se formó el famoso rombo Pirlo-Seedorf/Gattuso-Rui Costa que maravilló a Europa, y que unos años más tarde tuvo su continuidad con Kaká reemplazando al portugués».