«Es un jugador de la casa y queremos que sea nuestro central en los próximos diez años«, eso fue lo que manifestó en el día de ayer Gaizka Garitano acerca de Pablo Insua, si bien dejó también claro que lo importante es el crecimiento y la progresión del jugador, motivo por el que tanto él como el club están valorando la idoneidad de una posible nueva cesión.
Si se confirma el fichaje de Albentosa para el Deportivo, y si el brasileño Sidnei Rechel sigue un año más bajo la disciplina herculina, todo hace indicar que el central de Arzúa no tendrá más remedio que hacer nuevamente las maletas si quiere disponer de los minutos necesarios para continuar mejorando como defensa en Primera División.
Ante su posible salida, cabe recordar que el zaguero gallego finaliza contrato con el club blanquiazul en junio de 2018, por lo que le resta esta temporada y una más a las órdenes de la entidad coruñesa. ¿Cuál es el riesgo? Que si sale de Riazor en calidad de cedido sin renovar previamente y hace un campeonato destacable, solo le restaría un año más de contrato y podrían llegar otros equipos con la intención de ofrecerle una mejora económica y/o deportiva para salir del conjunto herculino a coste cero a partir del 2018.
Quizás por ello, una de las tareas importantes a realizar desde la Plaza de Pontevedra si realmente se desea dar continuidad a la carrera de Pablo Insua con la elástica deportivista, es la de prolongar su contrato antes de permitir que salga nuevamente ‘prestado’ a otro club.