El Deportivo se atrevió a combinar frente a un Mallorca que apostó por los balones largos y el juego directo, conceptos claves en el vocabulario de Caparrós. La jugada le salió bien a Oltra.
Regresaba Caparrós a Riazor. Y regresaba también su propuesta futbolística, ésa que tanto se criticó en su momento pero que da réditos en todos los equipos por los que pasa. Deja un bloque sólido y en muy alto nivel en lo físico tras su marcha, apoya la cantera, fortalece la estructura defensiva y mejora –sin duda- el poderío de sus equipos a balón parado. En el Dépor no despuntó algunas de estas características, pero sí en Sevilla y en Bilbao, ciudades donde despierta más simpatías que apatías por el legado que dejó.
En Mallorca poco se le puede reprochar. Para lo que tiene, lo sabe utilizar. Aouate, Geromel, Pina, Arizmendi y Hemed hacen la columna vertebral del equipo, con chispazos de Martí, Pereira o Víctor y de futuras promesas como el joven Marc y el ya conocido Nsue. Ayer en Riazor no triunfó esa propuesta del ‘pelotazo’, y sí la del Deportivo que intentó llegar al portero israelí a través del balón. Con él en el suelo, y no en el aire. Ahí destacó Valerón, como tantas otras veces.
UNO POR UNO:
Aranzubia: 7. Resolvió todos los problemas que creó el Mallorca y consiguió dejar su portería a cero. Errático con el balón en los pies.
Laure: 6. Lo pone todo sobre el campo y de vez en cuando ese ímpetu le hace cometer errores de bulto.
Zé Castro: 6. Impecable durante la primera parte, el portugués emborronó su actuación con un impreciso pase a Aranzubia que a punto estuvo de convertir en el empate Arizmendi. Empezó la jugada del gol de Bruno.
Ayoze: 5. Correcto partido del canario, que no se dejó ver mucho en ataque pero no concedió en defensa.
Bergantiños: 7. En todas partes. El coruñés mandó a sus compañeros, dio equilibrio al centro del campo y frenó las acometidas bermellones. Imprescindible para las coberturas.
Domínguez: 6. Fino en la combinación y en la distribución, sin embargo le costó más trabajo ayudar en tareas defensivas.
Bruno Gama: 7. Su gran actuación frente al Mallorca, con gol incluido, acalla las críticas de las últimas semanas. Tras un comienzo irregular, el portugués se reivindica con tesón y esfuerzo.
Valerón: 7. El mediapunta volvió a sobresalir con luz propia. Destellos, detalles, fantasía dibujada sobre un terreno de juego. Caparrós se rindió a él en rueda de prensa.
Pizzi: 7. Aunque ha de corregir sus ínfimas ayudas defensivas, en ataque tiene dinamita. Domina los golpes francos.
Riki: 5. No se encontró cómodo sobre el campo y apenas pudo aprovechar las escasas ocasiones que se crearon en la primera parte. Dos tiros, ambos por fuera.
Nelson Oliveira: s.c. Sustituyó a Riki y se lesionó al cuarto de hora en una carrera con Geromel. Su baja podría ser de entre cuatro y ocho semanas.
Camuñas: 5. Sigue sin encontrar su sitio. Poco se parece a ese Camuñas que deslumbró en Pamplona, Huelva o Jerez.
Bodipo: s.c. Entró por la lesión de Oliveira y, con el apoyo del público, corrió cualquier balón como si fuese el último.
EL MEJOR:
Marchena: 8. El mejor del partido para los integrantes de Riazor.org. Certero en las entradas, quirúrgico en la salida de balón… el sevillano está mostrando en Riazor las razones por las que tiene tanto peso en el fútbol español.
LAS CLAVES:
Juego trabado. Caparrós planteó un partido de contacto, un encuentro con el balón más tiempo en el aire que en el suelo. El Dépor se esforzó en rasear el esférico.
Al mal tiempo, Bruno Gama. El portugués pudo reivindicarse tras recibir críticas por su inicio de campaña. Su gol fue suficiente para superar a un Mallorca que tuvo su mejor ocasión en los pies de Arizmendi.
LO MEJOR:
Tres puntos de oro. Vital victoria del Deportivo después de pasarse cerca de dos meses sin ganar. Sirve para salir de los puestos de descenso y da moral para los próximos encuentros.
La afición. Responde en los buenos, en los regulares y en los malos momentos. Ayer ni la hora ni el tiempo acompañaron, y una vez más estuvieron allí.
LO PEOR:
Lesión de Nelson. Baja importante la del ariete portugués, que deja a Riki y a Rodolfo Bodipo como únicos delanteros. Oltra tendrá que buscar alternativas.