El Caso Jimmy sigue avanzando en los tribunales y hoy se ha conocido que el testigo protegido ha identificado ante el juez a cinco ultras del Frente Atlético, al que él también pertenece, como los autores materiales de la muerte de Jimmy el pasado 30 de noviembre de 2014 antes de un encuentro entre Dépor y Atlético de Madrid.
Tal y como informa la agencia Efe, el testigo protegido ha mantenido ante el titular del Juzgado de Instrucción 20 de Madrid, Pedro Merchante Somalo, una versión con algunas contradicciones respecto de los testimonios que ofreció ante la Fiscalía y luego en el juzgado de Menores, pero que meses después fueron desacreditados por la Audiencia Provincial de Madrid.
El testigo, que durante una hora ha respondido al juez, al fiscal y a su defensa, ha variado ligeramente su versión sobre los autores materiales, al pasar de cuatro a cinco supuestos homicidas. Se tratan, según su tesis, de un menor condenado por homicidio pero que ya fue absuelto por la Audiencia de Madrid, dos de los cuatro ultras del Frente Atlético que fueron excarcelados por el juez, y otros dos hinchas que fueron detenidos por la Policía.
En su declaración, ha reconocido ser miembro del Frente Atlético y que participó en la multitudinaria pelea en las inmediaciones del estadio Vicente Calderón. Al respecto, ha explicado que cuando vio que llegaban los Riazor Blues el «salió a mirar», aunque rápidamente se vio inmerso en la pelea hasta el punto de que estuvo a «apenas cinco o seis metros» de la agresión a Jimmy que le provocó la muerte, lo que le permitió identificar a los presuntos autores materiales.
Según las fuentes, el testigo ha asegurado que presenció toda la agresión contra Jimmy con claridad pese a que se estaban «lanzando tornillos y cócteles molotov», y que iba vestido de negro como la inmensa mayoría de los ultras. Cuando se le preguntó sobre la posibilidad de que él hubiera participado en la agresión lo negó, aunque de formar nerviosa, según apuntan las fuentes consultadas por Efe.
Declararon también tres agentes
También han declarado tres agentes, entre ellos el instructor del segundo atestado, que ha admitido un error en el primer atestado pero que luego ha mantenido la versión sostenida por el testigo. Y aunque ha reconocido que era difícil identificar a los presuntos homicidas por ir todos de negro, ha dicho que probablemente aquellos a los que señala el testigo estuvieran ahí.
Ahora el juez ha citado para el 5 de febrero a los dos agentes que contactaron con el testigo en su trabajo y, también, tiene que resolver la petición de la Liga de Fútbol Profesional de citar como testigo al menor que fue absuelto de ser autor material de la muerte.