Eneko Bóveda fue el encargado de lanzar un mensaje de tranquilidad tras el triunfo del Deportivo ante el Mallorca. Pide echar la vista atrás y recordar dónde estaba el equipo hace unos meses: «De aquí al domingo te haces mil películas. Un partido con gol en el minuto uno, con gol en el 20, en el que marcas tu antes… pero el que mensaje que enviamos es que este equipo ha sufrido mucho y hemos pasado, dentro de lo que es esto, miserias. No podemos olvidar lo doloroso que es perder, no llegar a los objetivos. Todo esto tiene que hacer que valores donde estás y no dejar ningún cabo suelto«.
No oculta que el resultado es bueno, pero no lo ve definitivo: «Antes de la eliminatoria decíamos que si no había goles sería para ellos y eliminamos ese factor. Pero vamos con humildad y toda la normalidad del mundo. Entre dos equipos de un nivel bastante similar, un 2-0 no es un resultado exagerado ni sorprendente. Puede pasar lo mismo para el otro lado. Cuanto más pase el tiempos e olvidará lo mal que lo pasamos ante el Málaga, pero no fue nada sencillo. Sufrimos mucho. La dificultad es máxima».
No teme Bóveda una encerrona en Son Moix: «En un partido que nos jugamos tanto todos, que haya fricción, palabras más altas y protestas… es un poco inevitable. No rehuimos de meter el pie y no vamos a dejar de chocar, de ir a jugar. Debemos ser inteligentes a la hora de gestionar y sobre todo dejar que el árbitro haga su trabajo. Mirarnos a nosotros».
Al vasco no le preocupa que ya hayan comenzado los preparativos por parte de la afición, siempre que eso no influya en el vestuario: «Claro que lo entiendo. Entre otras cosas, uno se aficiona a un equipo para vivir situaciones de estas, que tampoco se dan mucho en la vida. Tienen derecho a disfrutar de su pasión, no nos va a perjudicar. Somos nosotros los que tenemos que salir al campo, nosotros sí que somos los que no tenemos que estar inflando globos y comprando serpentinas, sino jugando y dando lo mejor que tenemos».
Bóveda y sus elogios para Álex Bergantiños
Bóveda también confirmó que Álex Bergantiños ya se había puesto en contacto con sus compañeros para tranquilizarlos: «Nos ha mandando una foto de su cara. El pobre tenía una herida importante. Pero lo están cuidando entre la gente que más le quiere y está bien».
El lateral elogió su valentía en la jugada en la que chocó con Pedraza: «No es dedicarle la victoria, él fue parte activa en ella. Un balón que otro dudaría en ir, no iría, o iría de otra forma, el fue con fe, llegó a tiempo y con la mala suerte de que el otro jugador hace lo mismo. Fue una jugada desgraciada, pero una de las acciones más determinantes fue mérito suyo».