Eneko Bóveda atendió a los medios de comunicación tras la primera sesión grupal del Deportivo a trece días del encuentro ante el Sporting. El lateral se refirió a su estado físico y a la mentalidad con la que el equipo afrontará las once jornadas que tiene por delante para sellar la permanencia en Segunda División.
El futbolista vasco reconocía que ha sido una preparación atípica aunque por fin parece haber superado sus problemas físicos. «Estoy bien. Estaba ansioso por incorporarme y vivir el día a día en grupo. Con lesiones de por medio es peor, pero ahora mismo soy uno más. Eso no garantiza que no me vaya a pasar nada de aquí al final de temporada pero ahora mismo estoy bien y la mejor noticia es que estamos todos disponibles para el entrenador».
El Deportivo ya conoce la fecha y el horario de las dos primeras jornadas de competición. El conjunto blanquiazul tendrá 48 horas menos de descanso que el Oviedo a la hora de afrontar el choque ante el conjunto ovetense. Bóveda cree que los equipos deben acostumbrarse al ritmo de competición que tienen por delante aunque reconoce que jugar antes supone una pequeña ventaja. «La única ventaja posible era empezar antes y ser de los primeros en jugar porque después ya va todo seguido y con pocos días de descanso. El Oviedo ha tenido suerte porque debuta el viernes, pero nos tenemos que acostumbrar a ese ritmo de partidos y no va a ser una excusa para rendir peor. Los jugadores somos conscientes de que nuestra recuperación en 72 horas tiene que ser total».
Este ritmo de encuentros y competición mantiene en vilo a preparadores físicos y recuperadores ante el importante número de lesiones que pueden sufrir los futbolistas. Bóveda considera que «hay evidencias de que jugando dos partidos por semana los datos dicen que la gente tiene más lesiones musculares y se pueden multiplicar hasta por cuatro. Eso va a ser difícil evitarlo pero hay toda una serie de componentes del club que están pendientes de intentar hacer lo mejor posible en el tema de prevención de lesiones y fatiga y si podemos sacar una ventaja porque haces las cosas mejor que otros equipos puede ser una ventaja importante».
El equipo tiene por delante once jornadas para alcanzar el objetivo de la salvación, una situación que como reconoce el propio Eneko Bóveda, genera presión. «Presión no hay duda que tenemos. Se puede decir que podemos perder mucho y ganar no tanto. El reto es difícil porque es evitar algo malo pero bueno, al final echaremos cuentas de cuantos partidos hay que ganar pero después yo creo que es mejor enfocar cada partido dejando un poco de lado donde está el equipo en la clasificación. Si uno se acerca a su mejor versión eso se traslada al campo y es el mejor enfoque».