Keko Gontán se presentó como nuevo jugador del Deportivo y relató cómo han sido sus primeros días en A Coruña, donde ya se siente como en casa: «Lo comentaba con mi mujer, estamos muy a gusto. Me ha sorprendido la amabilidad, lo agradable que es la gente por la calle. Todo lo que te ofrecen. Por lo que estoy viendo es un club familiar, y con los compañeros también estoy a gusto. De momento, inmejorable, vengo con mucha ilusión de volver a sacar al mejor Keko«.
El madrileño desveló cómo había sido la negociación y no oculta que temió hasta el último momento que el jeque no le dejara salir del Málaga: «Surgió todo en los últimos días. Al principio la operación era inviable, pero luego empezaron a cuadrar las cosas. El interés ha sido lo más importante. Necesitaba recuperar confianza, sentirme querido y en el Dépor fue donde más noté que podía darse esa situación. Con el jeque nunca se sabe. No porque sea mejor o peor, pero a veces toma decisiones según le parece, sin consultar a nadie. Aunque todos en el club estuviesen de acuerdo, si él no hubiese querido… tenía ese temor de que no quisiese aceptar porque él me apreciaba bastante«.
Firma dos años y medio, «aunque en el fútbol no hay contrato asegurado, si no funcionas el club te busca salida», y espera regresar con el Deportivo a Primera, aunque es consciente de que será difícil hacerlo este curso: «No nos vamos a engañar. Después de lo que se vivía hace mes y medio, lo que se necesita es la permanencia. Otra cosa sería engañarse. Si la conseguimos rápido, quizá haya tiempo, pero piano piano. Desde Málaga se veía lo que en toda España, que el Dépor tenía una plantilla para estar mucho mejor, pero que algo estaba pasando y se iba para abajo. Pero ya no desde Málaga, seguro que vosotros aquí también lo pensabais. Hay que dar gracias porque haya cambiado la situación así de rápido».
Keko ya se ha subido al carro de Fernando Vázquez
Fernando Vázquez tiene encandilado al deportivismo, pero también a un recién llegado como Keko, que no ha tardado en comprobar el porqué del éxito del técnico: «Desde dentro se ve todavía más carismático. No lo había visto nunca y el otro día me hizo mucha gracia cuando fue a celebrar el gol corriendo con la afición. A mí me gusta eso, las cosas hay que sentirlas. Prefiero eso que una persona fría. Luego en el vestuario es cariñoso y cercano. Eso me gusta».
Así explicó Keko su situación en el Málaga y el futuro del club
Keko apenas ha jugado este año después de ser importante la temporada pasada en Primera División con el Valladolid. Estaba tranquilo, porque sabía que no era un tema deportivo, pero reconoce que le afectó: «A nivel personal y mentalmente era difícil de llevar. Han sido seis meses un poco raros. El club no quería que me quedase y yo no quería quedarme. Estuve sin convocar, empecé a jugar y bien, pero me lesioné y ya no volví. Estabas en un sitio que no querían que estuvieses y eso hace que no estés a gusto«.
El centrocampista da su visión de lo que está ocurriendo en La Rosaleda, mirando incluso a medio plazo: «Me parece que tienen una gran plantilla, mucho potencial. Pero como me estaba pasando a mí, le está pasando a muchos compañeros. La situación institucional es inestable y el jugador necesita seguridad para rendir. Estar pendiente del campo. A veces allí se está más pendiente de lo de fuera. Aunque la gente y los jugadores no tenemos información real, porque cada uno contaba una historia, sí hay ese temor. Nadie sabe lo que está pasando (amenaza de descenso por parte de LaLiga)».
Para terminar, Keko reconoció que no fue plato de buen gusto que lo relacionaran con la Operación Oikos: «Obviamente, en verano lo pasamos mal. Te vinculan con una cosa de la que no tienes ni idea ni nada que ver. Ha quedado claro que no tuvimos nada que ver, ni yo ni los compañeros del Valladolid. Pero sí, lo pasamos mal«.