Fernando Vidal, salvo sorpresa, será el nuevo presidente del Deportivo. Falta saber si cogerá desde ya el relevo o si tendrá que esperar a enero, pero su llegada como sustituto de Paco Zas parece algo descontado. Su aterrizaje en el club que abandonó hace poco más de dos años anuncia un cambio radical en la parcela deportiva del primer equipo, que se encuentra sumido en una de las mayores crisis de su historia y parece abocado al descenso a Segunda B.
Por todo esto, Fernando Vidal no llegará a solo al Dépor. En su cabeza está reforzar notablemente al equipo. Por ahora, según avanzó DXT Campeón ya ha conseguido, además de una renegociación de la deuda, un acuerdo con ABANCA para poder financiar la reestructuración de la plantilla. Un préstamo económico necesario para un Dépor que, a día de hoy, se encuentra al límite de su tope salarial. Con Richard Barral a la cabeza, el que fuera director deportivo blanquiazul previo a Carmelo del Pozo, ya se han iniciado los contactos con varios ex, que parecerían dispuestos a regresar a Riazor.
Un entrenador gallego
Según destaca el Diario As, la primera modificación de Vidal llegaría en el banquillo. Luis Cesar Sampedro abandonaría el club coruñés tras un paso para olvidar en el que, hasta el momento, acumula cuatro empates y seis derrotas en diez partidos. El elegido para dirigir la nave blanquiazul saldría de la terna formada por Fernando Vázquez, Rubén De la Barrera y Raúl Caneda.
Ya hubo algún contacto con el de Castrofeito, que volvería a Riazor después de que en 2014 fuese despedido por Tino Fernández cuando todavía estaba en su equipo Fernando Vidal. No sería su primera llegada al Dépor en una situación complicada, ya que en 2013 cogió al equipo hundido en la tabla de Primera División y estuvo a punto de salvarlo. Posteriormente, tras un verano convulso donde el club casi desaparece, logró el ascenso directo a la máxima categoría del fútbol español con un equipo plagado de canteranos.
Su última aventura en el banquillo fue en 2016, en el Mallorca, donde acabó salvando al equipo del descenso a Segunda B en su primer año, y fue cesado a mediados del segundo por la mala situación clasificatoria.
Los otros dos candidatos, Rubén De la Barrera y Raúl Caneda son opciones con menos experiencia. El primero, de 34 años y natural de A Coruña, cuenta con el bagaje de haber entrenado a la Cultural Leonesa en Segunda División tras haberla ascendido. Actualmente se encuentra sin equipo tras haber dejado en noviembre el Al Ahli de la liga de Qatar.
Por su parte, Raúl Caneda, de 50 años, no ha ejercido nunca como primer entrenador en España, y su experiencia se reduce a al Ittihad FC y Al-Nassr FC, ambos de la liga de Arabia Saudí, y al Umm Salal de la liga qatarí. Fue segundo entrenador de Juanma Lillo.
Tres «ex» para reforzar al equipo
En el césped también se plantean novedades, y por ahora, en la lista de Vidal hay apuntados tres nombres conocidos por la afición deportivista que podrían recalar en A Coruña próximamente. Según As, Celso Borges, Emre Çolak y Luisinho serían los tres primeros futbolistas que la candidatura de Vidal habría “tocado” para ver su disposición a volver a vestir de blanquiazul.
El caso de Çolak sería el más sencillo de los tres. El turco, de 28 años, militó en el Deportivo durante dos temporadas, jugando un total de 63 partidos, anotando cinco goles y repartiendo once pases de gol. En el verano de 2018 abandonó el club, siendo traspasado al Al Wahda saudí por un millón de euros.
Su experiencia no fue del todo buena, ya que apenas jugó quince partidos, en los que anotó un solo gol. Finalmente, su contrato fue rescindido y en la actualidad se encuentra sin equipo, por lo que su llegada al conjunto blanquiazul se antoja factible a falta de un acuerdo económico entre club y jugador.
Un poco más complejo es el caso de Celso Borges. El costarricense, de 31 años, jugó en el Deportivo durante tres temporadas y media, en las que disputó 111 partidos y marcó quince goles. Se marchó en el mismo mercado que Çolak con dirección al Goztepe turco, que abonó un millón y medio de euros al conjunto blanquiazul.
En su primera temporada en Turquía participó en un total de 35 encuentros, anotando dos goles. Sin embargo, su papel ha cambiado en esta nueva campaña, donde hasta la fecha apenas ha disputado ocho partidos. La falta de minutos y los problemas que está presentando el Goztepe para pagar a sus jugadores podrían abrir la puerta de salida a Borges. Aún así, el Dépor tendría que esperar a que el jugador rescindiese contrato o tratar de llegar a algún tipo de acuerdo con el conjunto turco, algo que se antoja complicado.
El último caso es el más complejo de todos: Luisinho. El portugués, de 34 años, jugó en el Depor durante 5 temporadas, en las que disputó 151 partidos y anotó cinco goles. Al igual que los dos casos anteriores, salió del club en el verano del descenso a Segunda División hacia el Huesca a coste cero.
Su primera campaña como oscense estuvo marcada por una lesión de rodilla, que le tuvo alejado de los terrenos de juego casi ocho meses. Sin embargo, esta temporada su protagonismo está siendo grande, disputando, hasta la fecha, trece de los veinte partidos que ha jugado el Huesca esta temporada. Su salida se plantea muy complicada siendo titular en uno de los equipos punteros de la categoría. Habrá que ver si Fernando Vidal y compañía pueden hacerla posible.