No corren buenos tiempos para el deportivismo, que vive entre la ruptura social y el mal momento deportivo del equipo que este fin de semana no pudo pasar del empate sin goles ante el Espanyol.
Sin los Blues en la grada -decidieron ausentarse del campo tras no dejarles colocar una pancarta en recuerdo a Jimmy-, y sin un guión claro desde la banda, el Deportivo no consiguió más que un punto ante un Espanyol que inquietó en los últimos segundos a Fabricio. Los de Víctor Fernández desperdiciaron así una oportunidad de oro para coger algo de aire con respecto a la zona roja de la tabla de clasificación.