Tras la dolorosa derrota ante la UD Las Palmas en el debut de Cristóbal Parralo, Lucas Pérez quiso dar la cara esta mañana y se pasó por la sala de prensa de Abegondo. «Dentro consideramos que somos un buen equipo y un buen grupo, nos llevamos todos bien y la sensación que tenemos es que podemos dar más y es lo que queremos. Saber lo que quiere el nuevo entrenador y plasmarlo en el campo. Hay que estar tranquilos. Lo de ayer son detalles. El balón al palo de Schär, la expulsión… Y aún así tenemos 25 minutos en los que pudimos hacer mucho daño a Las Palmas y empatar el partido. No es una excusa, pero la pretemporada no se hizo de la mejor manera porque hubo jugadores que llegamos tarde y lo que queremos ahora es trabajar con el nuevo entrenador, que se recuperen los lesionados y poder comprender lo que él nos pide para afrontar la temporada. Esto no se va arreglar poniéndonos nerviosos. En el fútbol todo cambia rápido y lo podemos cambiar el lunes en Las Palmas», afirmó en su llamamiento al calma.
En la misma línea, el coruñés destacó que tiene que «trabajar para cambiar la situación» pero «no aquí en rueda de prensa sino entrenando y en el terreno de juego». Por ello, Lucas quiere «conocer cuánto antes las pautas del nuevo entrenador» ya que «por muchas individualidades buenas que tengas, si no estás bien colocado en el campo, no sabes la manera de presionar, la manera de cómo trabajar…». «Ese tipo de cosas las sabíamos con Pepe Mel y no salían y ahora con Cristóbal lo que tenemos es saber los errores que hemos tenido, escucharle y ver su manera de ver el fútbol. Con dos días que lleva el míster no puedes trabajar mucho. Poco a poco hay que ver la manera que quiere de defender, de presionar… Todo eso hay que verlo en el día a día», añadió.
Por otro lado, la expulsión de Juanfran ocupó gran parte de la comparecencia, algo de lo que «hay que aprender para que no vuelva a pasar». «Decirle a él y a todos, incluido a mí, que no se puede hacer eso, dejar al equipo con diez cuando estás 0-2. Hablé con Mateu y me extraña. A mí es un árbitro que me gusta mucho porque dialoga. Se lo comenté, me dio su explicación y hay que aprender de los errores. Mañana me puede pasar a mí o a otro pero hay que aprender. Si el árbitro te dice que te calles, aunque no hayas faltado al respeto, pues te callas. Es una decisión del árbitro y hay que respetarla», aseveró.
Sin embargo, declaró que «los árbitros se equivocan para todos» aunque señaló también que les han perjudicado en los últimos encuentros: «el otro día (contra el Girona) si ve el penalti que me hace nos habríamos puesto seguramente 1-0 y el resultado cambia».
A nivel personal, comentó que cada día se encuentra «mejor» y que va «poco a poco cogiendo la forma» y quiso explicar también su rifirrafe con la grada: «puedo entender que la afición pite o no esté contenta por perder o no estar bien. No entendía que pitaran por tener otro córner, pero yo con la afición no tengo ningún problema. Siempre han estado ahí y no se les puede reprochar nada».