Lucas Pérez es la gran estrella del Deportivo. Emociona en el terreno de juego y emociona también cuando habla del conjunto gallego, de los ídolos pasados y de su infancia plagada de los colores blanco y azul. Besa el escudo cada vez que marca con la camiseta del conjunto herculino pero ya ha explicado que es con la única con la que lo ha hecho y la única con la que lo hará. Sus 12 goles en 16 partidos, sus récords, su liderazgo… han enamorado a la parroquia deportivista, que lo tiene en altísima estima.
Para la afición, Lucas es intocable y es lo mismo que desearía el club, cuyo presidente ya ha manifestado que le gustaría que el delantero coruñés pudiese retirarse como blanquiazul. Solo una oferta mareante podría cambiar el destino del ‘7’, pero no será en este mercado de invierno, tal y como ha reconocido su representante Rodrigo Fernández en el diario Marca a los compañeros Juan Yordi y Pepe Torrente. «En febrero Lucas seguirá jugando en el Deportivo. Su situación contractual se resume en que está feliz, y la felicidad es difícil que se pague con nada».
Es, por tanto, que el Dépor ha intentado los primeros acercamientos para renovar y ampliar el contrato de Pérez. «Las conversaciones con el Dépor son fluidas, no sólo para hablar de la renovación. Es verdad que algo sí se ha hablado. Todos estamos muy contentos y estamos dispuestos a hablar por supuesto. Ojalá Lucas pueda seguir a la edad de Manuel Pablo en el Deportivo». El deportivismo sonríe con estas palabras. El deportivismo sonríe por saber que va a tener al ídolo en la ciudad los máximos años posibles.