El presidente de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) Luis Rubiales, estuvo ayer jueves en Abegondo para reunirse con los jugadores de la primera plantilla del Dépor. Posteriormente compareció ante la prensa para manifestar en un tono optimista su alegría porque ha “salido el sol” en el Deportivo, refiréndose a la recuperación económica que está experimentando la entidad presidida por Tino Fernández.
La imagen de un Rubiales sonriente y alegre de ayer, poco tiene que ver con la que ofreció el 31 de julio de 2013, cuando por culpa de los impagos a los jugadores, el club estuvo al borde del descenso administrativo con las dramáticas consecuencias que ello podría acarrear. Fue quizás uno de los días de mayor nerviosismo e incertidumbre que se recuerdan en las últimas décadas en el club.
Además de esta vision positiva, Rubiales también mostró su admiración por el rendimiento del equipo este año, calificando la temporada como “muy buena” y destacando la labor del técnico Víctor Sánchez del Amo, de quien dijo que está haciendo “un temporadón”.
Lo cierto es que el club ha vivido una década convulsa. Tras aquella famosa eliminación en Champions contra el Oporto de Mourinho en 2004 y un curso en el que no ganó ningún partido en la fase de grupos en 2005, el Dépor no volvió a jugar la máxima competición continental y dejó de ingresar suculentos beneficios económicos, lo que junto con otros factores, sumió a la entidad en unos años de depresion donde la falta de liquidez lastró continuamente los proyectos deportivos prácticamente de subsistencia.
Aunque seguramente todavía queda mucho trabajo por hacer, lo cierto es que desde la milagrosa salvación el año pasado en el Camp Nou, el proyecto ofrece una mayor solidez y estructuración. Prueba de ello es el descenso de jugadores en la plantilla en calidad de cedidos con respecto a temporadas anteriores, así como la capacidad de retención (hasta el momento) de jugadores abanderados del proyecto como Lucas Pérez o Pedro Mosquera y la consecuente mejora competitiva del equipo. Como declaró Rubiales, hay indicios de que en A Coruña, tímidamente, vuelve a salir el sol.