En su llegada a la ciudad herculina, el guardameta reconoció encontrarse «bien», aunque con la incertidumbre de lo que pasará tras las pruebas médicas.
Germán Lux tuvo que ser sustituido en el encuentro contra el Córdoba. Su rodilla se fue hacia atrás, y se marchó entre lágrimas del terreno de juego dejándole su lugar a Fabricio. El guardameta, en su llegada al aeropuerto herculino explicó sus sensaciones.
«Me encuentro bien, estoy con muy poco dolor. Mañana me haré las pruebas para ver qué tengo. Me encuentro bien, pero no se qué va a pasar», destacó el guardameta.
Quiso hacer una lectura positiva, y sobre todo mantenerse así con el deseo de que la lesión sea menos de lo que parece. «Las esperanzas la voy a tener hasta después de los estudios. Tengo que ser optimista y esperar lo mejor», reconocía el argentino.
Preguntado sobre su mala suerte, algo que parece perseguirle en su carrera, el cancerbero solo apuesta por superar las piedras que le pongan en el camino. «La suerte es lo de menos. Trato de hacer siempre lo mejor, entrenar, trabajar, después vienen estas cosas y hay que superarlas».