Si algo caracteriza la carrera futbolística de Germán Darío Lux, es la capacidad del guardameta para sobreponerse y volver a levantarse ante situaciones adversas, y así lo viene demostrando una y otra vez desde su llegada al Deportivo. Y este año, en la jornada 1, ha quedado patente que a pesar de la competencia no va a bajar los brazos.
En la temporada 2014-2015, tras comenzar como portero titular después de un brillante rendimiento el curso anterior en la Liga Adelante, perdió su sitio en el once tras una mala racha de resultados y el despegue de un Fabricio Agosto que terminó por convertirse en uno de los referentes del equipo. Sin embargo, en la campaña pasada, una grave lesión del meta canario propició que el de Carcarañá tuviese una oportunidad de oro para lograr su sueño de disputar un campeonato completo en Primera División.
Jugó 29 duelos hasta que una inoportuna rotura parcial del ligamento en su rodilla izquierda en el derbi disputado en el mes de abril en Balaídos ante el Celta le privó de la posibilidad de alcanzar ese objetivo. Se recuperó, y con la llegada de un nuevo entrenador, vio como el club herculino optó por reforzar la portería con Rubén Martínez y Tyton, dando la impresión de que el polaco podía ser una amenaza real a la hora de disputarle el puesto.
Sin embargo, en la primera alineación oficial de la era Garitano, ante el Eibar en Liga, ‘Poroto’ demostró que a sus 34 años todavía está en plenas condiciones de poder hacer realidad su ilusión, y una vez más, con trabajo y sacrificio comenzó el campeonato gozando de la confianza de su nuevo técnico. De momento, Lux toma ventaja.