El ya exportero del Fabril ha rescindido su contrato con el conjunto herculino al no contar para el primer equipo.
La etapa de Marc Martínez en el Deportivo ha llegado a su fin, tal y como anunció ayer el guardameta en su cuenta de Twitter. La falta de oportunidades con la primera plantilla ha sido la causa principal para el adiós del portero de 23 años, cuya situación durante los últimos meses ha evolucionado de una forma un tanto extraña.
Tras entrenar constantemente con el primer equipo durante las dos temporadas en las que formó parte del Fabril, se esperaba que el catalán diese el salto definitivo durante este verano, sobre todo ante la más que probable salida de Dani Aranzubia del club gallego. Sin embargo, Fernando Vázquez convocó para la concentración en Monforte a David Gómez, cancerbero del Juvenil A. En el que tenía que ser su año, el barcelonés se quedó fuera de los elegidos por el técnico de Castrofeito, por lo que el pasado lunes empezó a trabajar, una vez más, como jugador del Fabril. Finalmente, ante el temor de un estancamiento en su carrera, ha preferido rescindir su contrato con la entidad coruñesa para buscar un equipo de Segunda División B en el que seguir creciendo.
Formado en las categorías inferiores del FC Barcelona, Marc Martínez pasó dos temporadas en el Racing de Santander ‘B’ antes de llegar al Deportivo en el verano del 2011, en el cual ya sorprendió a José Luis Oltra por su rendimiento. Desde ese instante, compaginó sus actuaciones en el Fabril con entrenamientos junto a la primera plantilla, donde trabajó a las órdenes de José Sambade, el preparador de porteros que más lo ha marcado hasta el momento.
El curso 2012/2013 ha sido, sin duda, el mejor de la carrera de Marc, ya que estuvo a punto de lograr el ascenso a Segunda División B con el filial herculino y debutó en una convocatoria en Primera División.
Marc se ha querido despedir de toda la afición deportivista con el siguiente texto, colgado en su cuenta de Twitter:
Gracias a todo el deportivismo. Han sido dos años muy intensos en los cuales nunca imaginé que se podía ser tan feliz en una tierra que no es la tuya. Agradecer en primer lugar a mis compañeros, a mis entrenadores, en especial a Sambade, y como no a todos vosotros. Estas dos temporadas han dado para ‘moito’ en especial mi debut con el primer equipo en un amistoso contra el Rayo, una primera temporada muy buena en lo personal con el Fabril, pasando por el ‘orgasmo’ de Tarragona y cómo olvidar la noche del ascenso; una segunda temporada increíble con el Fabril, recordando mi debut en convocatoria en San Mamés… Y momentos menos buenos, como la lesión de Jesús Vázquez, el descenso ante la Real y la reciente eliminatoria en El Palo.
Solo puedo daros las gracias de corazón, y pase lo que pase, vosotros sois el Dépor. ¡Voltaremos!