Ya es oficial. El RC Deportivo ha anunciado que José Luis Martí será el nuevo entrenador del conjunto blanquiazul lo que queda de temporada. El técnico balear era uno de los nombres que más sonaban entre los posibles candidatos a ocupar el banquillo del equipo coruñés. Por delante tiene 9 jornadas en las que cambiar de forma radical la imagen dada por el equipo los últimos dos meses.
El nuevo técnico deportivista tiene 43 años y una larga carrera como jugador. En su trayectoria ha jugado en equipos como el Mallorca, Tenerife, Sevilla y Real Sociedad. Como entrenador, su carrera es algo más escueta. Ha entrenado en las categorías inferiores de su club natal, el Mallorca. Posteriormente daría el salto al fútbol profesional en la temporada 2015/2016, siendo el relevo de Raúl Agné en el banquillo del Tenerife, donde militó durante 2 campañas y media, hasta ser destituido en la jornada 25 tras una mala racha de resultados.
Se trata de un técnico que juega principalmente con dos esquemas: 4-3-3 o 4-2-3-1. Normalmente es de su agrado jugar con un doble pivote con músculo, capaz de cubrir los espacios y con una gran capacidad de destrucción para generar transiciones rápidas. No obstante, también puede usar pivotes creativos si cree que el nivel de los jugadores de ese perfil encaja en la idea del equipo. El entrenador balear tiene ante sí el reto de recuperar una parcela del campo que ha generado serias dudas durante gran parte de la temporada.
Martí afronta un reto complejo. Aunque el objetivo a principios de temporada era el ascenso directo, la distancia de 7 puntos a falta de 9 encuentros lo convierte en una meta difícil de alcanzar. Por una parte, debe asegurar los puestos de playoff, donde el Deportivo solo tiene un margen de 2 puntos con respecto al séptimo clasificado. Por otro lado, debe recuperar el nivel del apartado físico y anímico de un grupo que muestra una tendencia preocupante.
Y es que el conjunto que deja Natxo González no sabe lo que es sumar los tres puntos sobre el verde desde el 10 de febrero, donde consiguió superar al Granada a domicilio por 0-1. Desde entonces, 5 empates y 2 derrotas han dejado al conjunto herculino en una situación preocupante. La última derrota frente al Rayo Majadahonda en Riazor ha sido la gota que colmó el vaso, con algunos jugadores como el capitán Dani Giménez reconociendo que el equipo «ha tocado fondo».
Veremos si Josep Lluís Martí tiene la capacidad de recuperar a un grupo que parece hundido y consigue recuperar las buenas sensaciones y buenos resultados. Si lo hace, el conjunto deportivista tendrá verdaderas opciones de jugar en la élite del fútbol español la próxima temporada.