El míster blanquiazul dejó claro que, aunque la situación del equipo y de todo el club «es difícil», «es posible sacar esto adelante». Además, manifestó que va a alinear a los jugadores que «lo dejen todo dentro del campo en términos de trabajo, calidad y concentración».
Una victoria, un empate y dos derrotas. Ese es el balance que ha dejado Domingos Paciência en su primer mes como entrenador del Deportivo, unos números que, si bien han sido ante rivales complicados -Málaga, Real Sociedad, Osasuna y Valencia-, no son tan elevados como se esperaba tras su aterrizaje en A Coruña. El luso aseguró esta mañana que no se ha acabado el ‘efecto-Domingos’, porque él trabaja para que la mentalidad ganadora dure «siempre».
«No trabajo por efectos inmediatos -indicó el técnico-, sino por un trabajo permanente, que empieza y va hasta el final. Hasta hoy no tengo dudas que he tenido resultados por donde he pasado. En este momento no es solo el fútbol lo que está en juego, sino toda la situación que se está viviendo, y hay que saber que no es un momento fácil. El último partido las cosas no fueron bien, empezamos perdiendo y después es complicado para un equipo que está abajo. De mi parte y de parte de todos, es posible sacar esto adelante. Voy a trabajar siempre así, siempre con voluntad enorme de ganar, porque yo quiero ganar. Y si quiero ganar, quiero hacer que los jugadores quieran ganar«, aseveró en El Mundo del Fútbol.
El preparador de 44 años reiteró que el reto de conseguir la permanencia con el conjunto herculino es «difícil» porque «las cosas están complicadas» por la situación que atraviesa «no solo el equipo, sino todo el club». Sin embargo, abogó por «ser fuertes en los momentos de flaqueza», y dejó claro que «es posible llegar al final y mantenerse».
Respecto al once que alineará en el próximo encuentro ante el Getafe (sábado 2 de febrero, 18:00 h) , el de Leça da Palmeira afirmó que va a «poner a aquellos que van a trabajar y se van a dejar todo en el campo en términos de trabajo, calidad y concentración» porque «es lo que merece la afición». Además, reconoció que él también comete «errores» a la hora de tomar decisiones, pero esos fallos hay que «asumirlos y mejorarlos».
Sobre el choque en sí ante el conjunto azulón, el míster deportivista aseguró que, si sus hombres quieren «sacar puntos», tienen que «estar más concentrados, no cometer errores individuales y jugar como conjunto», ya que así estarán «más cerca de ganar». «El Getafe tiene delanteros con mucha profundidad y que trabajan mucho. No tiene procesos complicados, pero, lo que hace, lo hace simple y son buenos en eso. Sabemos cómo juegan, que nos espera un encuentro contra un equipo que también hace tiempo que no gana y está tratando de darle la vuelta a la situación. Tenemos que estar preparados para eso», dijo.
En cuanto al calendario al que tendrá que hacer frente el club coruñés a corto plazo, el portugués indicó que ahora se enfrentarán a conjuntos -como el Getafe y el Granada- a los que tienen «que ganar y ante los que hay que pensar en hacer puntos» porque «están luchando en la clasificación con el Deportivo y son rivales directos».
El exdelantero del Oporto y del Tenerife, entre otros, declaró que Claudiano Bezerra Da Silva ‘Kaká’ -que, si nada se tuerce, será la próxima incorporación de la entidad blanquiazul- llegó a tierras gallegas «para ayudar», y lo definió como «un jugador con alta experiencia». «Ha jugado en el Herta de Berlín, en el APOEL, disputó una final de Europa League con el Braga… Es fuerte en el uno contra uno, y lo conozco bien. Vino en las condiciones posibles del club. Va a aportar«, comentó, a lo que añadió que, en caso de que haya algún fichaje más, espera una incorporación para «posiciones de adelante», y explicó que, además de Batuhan Karadeniz, han ojeado a «otro turco más, otros jugadores que juegan en España y en otros países».
Por último, Paciência reveló que Paulo Assunçao pidió «disculpas» tras su expulsión el pasado sábado ante el Málaga, y defendió que el brasileño «lo hizo con intención de ayudar al equipo», al tratar de «ponerse delante» para que «Zé Castro pudiera meter la pelota arriba más rápido», aunque «metió el brazo, llegó tarde y no actuó de la forma que tiene que hacerse».