Diez son las jornadas que ha tardado Bruno Gama en mostrar en la máxima categoría lo que el año pasado exhibió en Segunda. Bruno desniveló el choque ante el Mallorca y le dio al equipo la victoria necesaria para tomar aire en la tabla.
El rendimiento de Bruno había dejado algunas dudas hasta el momento. Su adaptación a Primera no ha sido del todo fácil y el equipo le necesita a pleno rendimiento. Gama es un jugador desequilibrante, rápido y dinámico, cualidades que el Deportivo necesita para ganar partidos y salir de los puestos bajos de la tabla.
Llega un momento clave de la temporada con enfrentamientos ante equipos directos como el Zaragoza y el Dépor requiere de las individualidades de Pizzi, Bruno o del gran Juan Carlos Valerón Valerón para seguir sumando puntos. Además, la baja de Nelson Oliveira deja a José Luis Oltra con una delantera cogida con pinzas.
Lo que no puede suceder más en la temporada es encadenar ocho jornadas consecutivas sin ganar. Estar en Primera supone afianzar el crecimiento como club. La igualdad en la clasificación provoca que el equipo tenga que hacerse fuerte en Riazor y sacar algún punto en los desplazamientos.
La Romareda se presenta como el escenario idóneo para lograr el primer triunfo fuera de casa después del ascenso a la máxima categoría del fútbol nacional. Una de las claves será mantener la portería a cero lejos de Riazor, algo que todavía no se ha logrado. De hecho Aranzubia ha encajado doce tantos en cinco salidas, datos que complican -y mucho- la consecución de resultados satisfactorios.
La mejor noticia que nos deja la semana es ver al equipo fuera de la zona de descenso, algo que tiene motivar tanto al grupo como a la afición. Una afición que, una vez más, me deja con la boca abierta.