En lo que señaló nada más terminar el encuentro como un «cambio simbólico», Seedorf le dio al público de Riazor lo que quería haciendo debutar a Mujaid ante el Villarreal. Lo colocó como lateral derecho, quizá sin darse cuenta del feo que, al mismo tiempo, le estaba haciendo a otro de los miembros de la plantilla que también estaba en el banquillo: Gerard Valentín. El catalán, que apenas suma 97 minutos en LaLiga, veía como su técnico decidía premiar antes al juvenil en el último partido en casa. Como sintiéndose culpable, al menos Seedorf tuvo un guiño hacia él asegurando en sala de prensa que sí jugará contra el Valencia en el cierre de temporada.
Así llegará Valentín a Mestalla, con esa sensación encontrada de no saber si está disfrutando de un premio por su trabajo en la sombra durante todo el curso, o completando el primer examen para pedir sitio en el Dépor 18-19. Porque a estas alturas y después de haber firmar por cuatro años en verano, cuando llegó procedente del Nàstic de Tarragona, pocos pueden aventurarse a asegurar si el jugador está preparado para ser importante en el conjunto blanquiazul.
En su primera campaña en A Coruña no ha logrado convencer a ninguno de los tres entrenadores que han pasado por Dépor. Ni siquiera para ganarse un sitio en el banquillo, siendo un descarte habitual en las convocatorias de Mel, Cristóbal y Seedorf. Sólo fue titular en dos encuentros. Ante el Málaga en Liga, por la baja de Juanfran, y en la vuelta de Copa contra Las Palmas. Su encuentro ante los andaluces, contra los que no estuvo muy afortunado, pareció ponerle la cruz para el resto un curso en el que acumula un total de 221 minutos.
No es que Juanfran haya sido el del año pasado, muy irregular durante todo el año, pero ni así ha tenido la opción de pelearle el puesto. De hecho, el club decidió reforzar el lateral derecho en el mercado de invierno con la llegada de Bóveda, que no tardó en adelantarlo en la rotación.
Ahora, con una profunda renovación de la plantilla en el horizonte que seguramente tenga en la salida del propio Juanfran uno de sus movimientos, Valentín necesita empezar a aprovechar su oportunidad cuanto antes. En Mestalla tendrá la primera etapa de una carrera que debe llevarlo a convencer tanto al recién llegado Carmelo del Pozo, como también a una afición que está deseando ofrecerle la mano a todo aquel que quiera subirse al barco en Segunda División.