Mientras el equipo entra en los últimos días de preparación de cara al estreno liguero contra la Real Sociedad (sábado 22 de agosto, 18.30), el Estadio Municipal de Riazor ultima detalles para darle la bienvenida a los aficionados que estrenarán la temporada 2015/2016.
Si bien en el Teresa Herrera ya se pudieron ver los nuevos marcadores ubicados en los dos fondos, así como las butacas que forman un mosaico en el que se puede leer ‘Dépor‘ y ‘1906‘ acompañados de diversas mejoras que han supuesto un buen lavado de cara al estadio del conjunto herculino, en los últimos días el trabajo se ha intensificado con la intención de mejorar el perímetro del terreno de juego.
Así es como las antiguas pistas de atletismo, que desaparecieron cuando se construyeron los fondos de Marathón y Pabellón han quedado totalmente cubiertas por un césped artificial que contribuirá a una mejora del aspecto visual del conjunto de Riazor. Unas obras que terminarán a principio de semana con la instalación de un césped que posee unas características especiales como apunta el club. «En toda esa superficie se ha instalado, entre el césped y el cemento de la pista, «Fine Tuned» un material para amortiguar el impacto y permitir que toda esa zona pueda ser utilizada por los jugadores suplentes para realizar su calentamiento durante los partidos».