El delantero herculino, uno de los más destacados en lo que va de temporada, promete «lucha hasta el final» en la pelea por conseguir la permanencia.
Riki está realizando una gran temporada en el aspecto personal, aunque su buen momento de forma no es acompañado por el resto del equipo, colista en la clasificación. La gran cantidad de goles encajados -54 en 24 jornadas- «nos condenan a estar donde estamos. Durante toda la temporada hemos encajado muchos goles, las tres victorias que hemos conseguido ha sido manteniendo la porteria a cero. Hay que basarse en ser un equipo sólido, agresivo. Hay que mantener la portería a cero», explicó en rueda de prensa.
Con la salvación a ocho puntos, el punta aseguró que «el equipo no está muerto. Vamos a disputar todos los partidos para intentar ganar y que la afición esté contenta con el equipo. Ellos están muy por encima de nosotros ahora mismo. Me han enseñado a luchar hasta el final, y mientras hay vida hay esperanza. Si todos remamos en la misma dirección vamos a sacar esto adelante«, puntualizó.
En cuanto a su gran momento de forma, se lamentó que de sus nueve goles, «solo han valido para puntuar contra Osasuna y Getafe. Intento aportar lo que puedo y lo que se. Arriba se pide a los delanteros goles y trabajo, ojalá no marcase pero que lo hiciera otro para ganar, que es lo que queremos«, argumentó.
Para ganarle al Real Madrid, próximo rival del Deportivo, «hay que hacer un partido muy fuerte. Estoy convencido de que la afición va a responder muy bien, hay que hacer un partido muy serio en todos los aspectos. Sobre todo no encajar«, destacó.
En cuanto a la unión en el vestuario, dejó claro que «todos somos uno. Hay que centrarse en ganar el sábado. Independientemente de que las victorias te refuerzan de moral, como el último que ganamos frente al Málaga, nos invitaba a despegar un poco. Tras cinco derrotas consecutivas, la cabeza no es la misma. Ante eso hay que ser fuertes y demostrar en cada partido que podemos ganar».
Destacó la «ilusión» de Fernando Vázquez, que llegó la semana pasada con el objetivo de salvar al equipo. Una misión para la que necesitará la ayuda de la plantilla. «Nos va a pedir sobre todo intensidad, y que lo demos todo para que podamos estar tranquilos, con la conciencia tranquila. En ese sentido el míster nos va a transmitir esa confianza».
Por último, la plantilla ha empezado a cobrar de nuevo. Riki apuntó que «las cosas van volviendo a su cauce, afortunadamente se ha ingresado una nómina, pero lo principal es conseguir el objetivo».