Alterando un poco los tiempos, Sabin Merino se presentó este viernes como nuevo jugador del Deportivo después de haber debutado ya. Fue para bien, de todas formas, ya que el vasco se estrenó con gol y victoria: «Estoy muy contento de estar aquí. Muy cómodo desde el primer día, me han tratado muy bien. Tener la suerte además de marcar y ayudar a que el equipo gane… No me puedo quejar. Ha sido llegar y besar el santo».
El delantero llevaba tres años sin marcar en partido oficial, pero apunta que no se puede rendir demasiado sin jugar: «Sí, tres años sin meter un gol, pero dos y pico jugando 15 minutos cada siete partidos. No se le puede valorar a uno por eso. Richard (Barral), lo primero que me dice es que me quieren para jugar ya. Con eso ya me convenció. No hacía falta más».
Acabó fundido y con molestias en los gemelos, pero no quiere parar y ya se ofrece a Fernando Vázquez para el domingo frente al Cádiz: «Estoy bien, pero la inactividad se nota. Entrenas todos los días, pero no competir… Llevaba tiempo sin jugar y siempre tienes esa duda de ver si estás preparado cuando te toque. Pero trabajar bien estos meses se ha visto recompensado. Estaba preparado y así lo asumí ayer. Al final todos los jugadores queremos jugar todos los partidos. Y cuando vienes de debutar y hacer gol quieres jugar sí o sí«.
Compromiso con el club coruñés
Firmando hasta 2022, Sabin Merino quiso mostrar su compromiso y así explica el por qué de su decisión: «Llegaba al colista porque iba último ahora, pero considero que el equipo, la plantilla y el club en general no se merece estar en esa posición. Al final es un club grande, que mueve mucha gente y tiene a una ciudad entera detrás. Tengo claro que es un gran club y quiero estar aquí. Creo al cien por cien que se puede sacar adelante esta situación, seguro».