El míster perico tuvo palabras de elogio para el que fuera su equipo durante nueve años y contra el que se enfrentará mañana a partir de las 12 del mediodía en Riazor.
El partido de mañana no será uno más para el entrenador del Espanyol. Sergio González, que formó parte de una de las mejores épocas del Deportivo, ha afirmado en rueda de prensa que el de esta jornada es un encuentro “muy especial”. Para el catalán, Riazor “es un campo mágico”. “He vivido ahí noches muy importantes y eso no se olvida. Cuando hablo del Dépor lo hago como de mi segunda casa. Me emociona y se me pone la piel de gallina”, explicó.
El técnico perico se mostró contento de haber pertenecido al conjunto herculino, pero no por ello quiere regalar nada al que hace unos años fue su club. “Fui nueve años jugador del Deportivo. Estoy muy agradecido por el tiempo que estuve allí. La gente valoró mi trabajo y todo lo que está relacionado con este equipo, pero ojalá acabe el partido con un buen resultado para nosotros”, apuntó.
No obstante, Sergio sabe que será “un partido complicado ante un rival incómodo y que querrá reivindicarse”. El entrenador del Espanyol destacó de los gallegos que “se encuentran cómodos con el balón”. “Los laterales son centrocampistas reconvertidos, tienen pivotes consistentes y movilidad arriba. Dejan espacios y plantean un partido con muchos goles”, indicó. Además, el exdeportivista añadió que los coruñeses “puedan generar huecos atrás” y que para evitar esto, los suyos deberán recuperar su “identidad”.
Sergio García se perderá el partido
Uno de los hombres más importantes del Espanyol, Sergio García, no estará en Riazor para enfrentarse al Deportivo. El delantero perico sufre una contusión en la musculatura isquiotibial de la pierna derecha y será una baja más que sensible para los catalanes de cara al encuentro de mañana. Sergio González ha calificado de “una pena” la ausencia del punta y es que hasta ahora, el ‘9’ blanquiazul es el máximo goleador del equipo con nueve tantos, empatado con su compañero Stuani.