El derbi deja sensaciones contrapuestas entre el Deportivo y el Celta. Mientras todo es alegría y esperanza en A Coruña, en Vigo el clima es más que convulso. Iago Aspas y Hugo Mallo, protagonistas en la resaca del partido.
Se preveía un duelo por todo lo alto, por mucho que los equipos ocupasen las últimas posiciones de la clasificación. Porque no hay derbis pequeños, ni en Galicia ni en ningún otro lugar. El ambiente a los alrededores del estadio de Riazor era cálido las previas al encuentro, pero quien más se encargó de calentarlo fue un jugador del Celta de Vigo que se acercaba al feudo blanquiazul en un autobús de la afición.
Hugo Mallo, lesionado de larga duración al romperse el cruzado en Copa del Rey frente al Real Madrid, se desplazó a A Coruña con la peña celtista ‘Iago Aspas’. Por Twitter apareció una foto del lateral de Marín con un cartel de ‘Se vende’ con el escudo del Deportivo, aderezado con los colores de Portugal. Una mofa burda, común de un hincha e impropia de un futbolista profesional.
Hoy Hugo Mallo pidió perdón por la mañana en la sala de prensa de A Madroa, pero quién sabe si tendrá que volver a hacerlo porque la foto fue una anécdota de lo que pasó después. Deportes Cuatro sacó unas imágenes del particular partido que vivió el celeste en las gradas de Riazor. Insultos, cortes de manga, enfrentamientos verbales… e incluso acabó citándose con cuatro aficionados deportivistas. Comportamientos de ultra al fin y al cabo.
Mario Bermejo, uno de esos jugadores que engrandecen este deporte por declaraciones como las de anoche, no se cortó a la hora de hablar a los micrófonos de la Cadena Ser y la Cadena Cope de la foto del lateral celtiña (aún no habían visto la luz las imágenes de las gradas). “Lamentablemente he visto lo que hizo. Son cosas que pasan. Cuando duermes con niños te despiertas meado. Somos un desastre en este sentido, no somos maduros. Pensamos que somos un equipo de barrio cuando estamos representando a toda una ciudad. Estamos en Primera División. Tendrá que asumir las gilipolleces que ha hecho”, indicó el delantero cántabro.
Tampoco tuvo pelos en la lengua Bermejo para hablar de la acción clave que marcó el devenir del partido, la calentura de Iago Aspas que costó la expulsión del ariete de Moaña. “Estaba avisado por el entrenador. Como persona tiene que madurar y cambiar su mentalidad, que no estás en el patio del colegio ni jugando con tus coleguillas un partido de empresa”.
Al mediodía Rafa Valero contaba para la Cadena Cope que tanto Hugo Mallo como Iago Aspas serán multados económicamente por el club.